Mazón plantea la supresión de la Conselleria de Vivienda en plena carrera por la construcción de VPO

Pudiera parecer un contrasentido que en un momento en el que la vivienda se ha convertido en uno de los elementos centrales de la precampaña electoral, y en el que todos los partidos compiten por ver cuál es el que más inmuebles de protección oficial es capaz de construir en la próxima legislatura, uno de los candidatos estuviese pensando en suprimir la conselleria del ramo. Pues bien, justo eso es lo que pretende hacer el líder del PP, Carlos Mazón, quien asevera que en la Generalitat sobran altos cargos y «enchufados», y que le basta con una dirección general que funcione como es debido. El recorte, con todo, no se quedaría solo ahí, dado que el candidato autonómico también tiene previsto fulminar la Conselleria de Transparencia con idénticos argumentos. Mazón realizó estos anuncios durante su intervención en un desayuno informativo del Executive Forum España celebrado este viernes en València, escenario en el que volvió a incidir en dos de sus propuestas estrella, como son la reducción de impuestos y la simplificación de la burocracia.

La necesidad de vivienda social, en plena escalada de los precios del alquiler y de los préstamos hipotecarios, es una realidad que han asumido las formaciones políticas, hasta el punto de que no hay día en el que no salga a relucir en las intervenciones de sus candidatos. Así, mientras el PSPV trabaja en un gran pacto con constructoras y ayuntamientos para impulsar las viviendas de protección oficial (VPO), con financiación, además, del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), el PP promete que levantará 10.000 pisos por medio de una actualización de los módulos para que salga rentable a los promotores.

Pero, para ello, según indicó este viernes Carlos Mazón, no va resultar necesaria una Conselleria de Vivienda. ¿Y cómo lo justificó? El candidato de los populares declaró que, en ocho años, el gasto corriente en la Generalitat se ha incrementado en un 80%, un porcentaje que le parece del todo excesivo. En este sentido, avanzó su intención de suprimir dos consellerias, empezando por la de Vivienda. «Vamos a construir 10.000 viviendas de protección oficial, pero para eso no necesito un conseller, dos secretarios, tres directores y veinte asesores. Me basta con una dirección general que funcione».

También tiene entre sus planes fulminar la Conselleria de Trasparencia, sobre la base de que «quiero que todo mi gobierno sea transparente. Eso te lo crees o no. Todo lo demás me parece grasa, apaños entre partidos para que todo el mundo tenga una silla y un gasto improductivo».

Las promesas de Mazón: más flexibilidad en el turismo residencial y menos burocracia

Mazón, además, destacó que estas supresiones van a permitir afrontar actuaciones de calado, como la promesa de su partido de que la educación sea gratuita para la franja de edad de cero a tres años, una medida que, calculan, tendrá un coste de 208 millones de euros. «Los vamos a sacar de la reducción de consellerias, altos cargos, enchufados y asesores puestos a dedo. De hecho, tenemos un récord de 350 asesores puestos a dedo», aseveró.

El candidato del PP volvió a incidir en el Plan Simplifica que ha preparado su partido para reducir la burocracia administrativa, lo que permitirá, dijo, que «el silencio administrativo positivo sea la norma y no la excepción, introduciendo, además, la responsabilidad patrimonial de la Administración ante los retrasos no justificados». Con ello, aspira a aumentar la competitividad de la Comunidad en cuatro puntos.

Preguntado acerca de las primeras medidas que piensa implementar si resulta elegido presidente de la Generalitat, aseguró que el primer decreto que piensa firmar será «la eliminación del impuesto a la muerte», en referencia al tributo sobre Sucesiones, así como la derogación de la tasa turística.

De hecho, buena parte de la intervención del candidato del PP estuvo centrada en la presión fiscal. Además de recordar las medidas ya anunciadas, aprovechó para criticar la normativa estatal que se está preparando para la armonización entre autonomías. Así, indicó que la palabra «armonización» es un título muy bonito que, en realidad, «lo que pretende esconder es que se están cargando el autogobierno».