«El municipalismo se ahoga cuando cierras el grifo de las inversiones»

¿Dónde empieza y acaba el municipalismo?

El municipalismo empieza en cada ayuntamiento, cada mañana, cuando se abre la puerta para recibir a los miles de ciudadanos que acuden con frecuencia a la primera administración que tienen como referencia por su cercanía y porque atiende todos sus problemas y necesidades. Y yo creo que nunca acaba, pero sí es verdad que se puede ahogar el municipalismo cuando cierras el grifo de las inversiones. Eso es lo que está ocurriendo ahora y el panorama es especialmente preocupante en Alicante.

¿Cómo dibuja la situación?

Llevamos varios años castigados por el Gobierno central a estar entre las provincias más perjudicadas en el reparto de los recursos, a pesar de ser la quinta en población. Tampoco el anterior Gobierno autonómico mimó a los municipios alicantinos. San Vicente del Raspeig es un ejemplo de las promesas incumplidas y de la carestía de nuevos servicios e infraestructuras.

¿Cómo cambiar esa dinámica de infrafinanciación?

Hemos entrado en una dinámica de estancamiento que hay que romper. En la Comunitat Valenciana los ciudadanos tuvieron claro cómo: cambiando de Gobierno. Pero, en España, se avecina un panorama desolador. Todo apunta a que solo se va a favorecer aquellos territorios con partidos independentistas que apoyan a Pedro Sánchez y, a la cabeza está Cataluña.

¿Qué debe tener un buen alcalde?

El firme propósito de recuperar la ilusión de los ciudadanos, pero también es necesario tener ambición y una clara visión de futuro para situar tu municipio como un lugar de referencia en tu provincia y en tu Comunidad. Se trata, en definitiva, de trabajar para mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos, garantizar el crecimiento y una proyección de futuro para nuestro tejido empresarial.

¿Cuál es el modelo de ciudad que quieren lograr para San Vicente en estos próximos cuatro años?

Con mucho esfuerzo y el apoyo de otras administraciones, San Vicente tiene un gran futuro por delante. Desde el nuevo equipo de Gobierno estamos trabajando con la vista puesta en ir hacia un modelo de ciudad más habitable. Para ello, hemos empezado por mejorar la limpieza urbana, una de las principales demandas de la ciudadanía. También estamos convencidos de que una mejor política de movilidad urbana puede dar vida a un municipio de servicios en el que el comercio y la hostelería deben cobrar más protagonismo. En esta propuesta hay que integrar, además, a la comunidad universitaria, que aporta un elemento diferencial de modernidad y dinamismo del que otros municipios carecen.

¿Cuáles son los retos de futuro que afronta el municipio?

Para llevar a cabo el proyecto de ciudad que queremos lo primero es tener todo el personal que hace falta en el Ayuntamiento de San Vicente. Nos encontramos al llegar hace unos meses una plantilla exigua y desmotivada y eso tiene que cambiar. Es necesario reforzar los cimientos actualizando la administración local para ofrecer más servicios públicos de máxima calidad.

El segundo reto es conseguir revertir una situación de sequía en inversiones a medio plazo con la complicidad de otras administraciones como la Generalitat Valenciana y la Diputación de Alicante. Contamos con ese apoyo, y así nos lo han trasladado sus máximos responsables, Carlos Mazón y Toni Pérez. Será la única manera de acabar con los grandes proyectos que están pendientes desde hace décadas y emprender otros nuevos en materia de tráfico y transportes, medio ambiente, movilidad, cultura, deportes, sanidad o educación.

¿Qué proyectos están ya en marcha?

Pocos. El Gobierno de Ximo Puig no ayudó mucho a esta ciudad. A pesar de que es la sexta más poblada de la provincia de Alicante y la undécima primera de la Comunitat Valenciana, son escasas las inversiones que se han llegado a ejecutar en los últimos ocho años.

La obra más destacada que está en marcha es el Pabellón Polideportivo, que esperamos inaugurar en 2024. En Deportes, también se está avanzando en la financiación de la fase dos del Centro del Agua para disponer de una nueva piscina cubierta climatizada y otra al aire libre.

En breve comenzarán, además, las obras de mejora de la calle Velázquez con ayudas de la Diputación de Alicante y estamos dando pasos importantes para la redacción del proyecto el IES número 6.

Otro proyecto que avanzará en 2024 es el del Centro Cultural de La Yesera, con 200.000 euros consignados en los presupuestos autonómicos. La Generalitat también se compromete a mantener las ayudas para rehabilitar el barrio Santa Isabel y, en dotaciones sanitarias, la Conselleria de Sanidad comenzará la redacción del proyecto del Centro de Salud número 3 en cuanto se cedan los terrenos municipales necesarios. Con todo esto, en 2024 se darán pasos importantes.

¿Cuál es el proyecto que destacaría y por qué?

Es difícil elegir uno, pero quizá la transformación de la cementera será el que más contribuirá al crecimiento y la modernización de esta ciudad con una mejora notable de las infraestructuras y servicios públicos a disposición de los ciudadanos. Hay que pensar a lo grande y trabajar con la vista puesta en alcanzar objetivos importantes si queremos ser una ciudad de referencia con todos los servicios e infraestructuras públicas que necesita nuestra población y nuestro tejido empresarial.