La lesión de Alvarito deja en anécdota el triunfo del Hércules en Cartagena (0-1)

La tercera victoria estival del Hércules se transformó desgraciadamente en anécdota en el minuto 49, justo cuando Cassio Júnior, trompicado, perdió el equilibrio y fue a caer encima del tobillo de Alvarito, que, de inmediato, sintió la punción dolorosa de la torsión del pie y comenzó a gritar. Su quejido se expandió por todo el recinto de La Manga Club, el escenario en el que el filial del Cartagena disputará sus encuentros de Liga en el grupo 4 de Segunda RFEF.

El atacante madrileño se quedó tendido sobre la hierba seca. Solo fue capaz de incorporarse cuando los dos fisioterapeutas que viajaron también hasta San Javier le auparon. Incapaz de plantar el pie derecho, colgado de los hombros de los dos colaboradores del servicio médico, dejó su sitio en el terreno de juego. Rubén Torrecilla aguantó la respiración hierático el medio minuto largo que tardó Alvarito en llegar hasta él desde la banda izquierda, lugar que ocupaba justo antes del accidente.

El técnico se interesó por el estado de su atacante, aturdido por el daño y el temor de haber sufrido un percance serio. Le tocó la tibia y torció el gesto. La primera exploración —y la inmediata evolución del golpe, que derivó muy rápido en una hinchazón bastante ostensible—, invitan a presagiar que padece un esguince, pero falta calibrar el la gravedad del mismo para saber si el capitán del Hércules ayer en Cartagena puede estar disponible para debutar en Liga dentro de dos semanas y media.

El duelo «amistoso» se saldó con un conato de pelea en el tramo final, y con Jean Paul y Rubén Torrecilla expulsados

El lance fue casual, mala suerte, no devino fruto de la dureza empleada por el filial del Efesé, que estuvo la mayor parte del encuentro a merced del Hércules, dominador del encuentro casi siempre. Sin embargo, y a pesar del carácter «amistoso» del compromiso en Murcia, el malestar con el colegiado fue más protagonista que el mejor fútbol de los visitantes.

En algunas circunstancias, los técnicos realizan la rotación en el arranque de la segunda mitad. Esta vez Torrecilla programó hacerlo a la hora de juego, diez minutos después de la lesión de Álvarito, que se retiró del campo en el 51. Su lugar lo ocupó Jorge Galvañ. Es evidente que ese percance en el que el técnico del Hércules perdió a uno de sus referentes ofensivos más notables le dejó marcado. Al poco, 180 segundos después, una falta no pitada por el joven colegiado sirvió para que el preparador blanquiazul elevara el tono de su indignación arbitral y acabara expulsado con roja directa.

La primera exploración al extremo madrileño, capitán ayer, apunta a un esguince del que hay que precisar la gravedad

Mientras todo eso sucedía, el resultado seguía siendo el del pitido inicial. El entrenador cacereño situó de inicio a Cendán en la portería, ordenó la defensa con Josema y Juanmi como centrales, con Samu Vázquez en el flanco derecho y Candelas en el izquierdo; armó un doble pivote con Roger Colomina y Mangada; escoró en el extremo diestro a Alvarito y en el zurdo a Ketu; y confió la definición del ataque a Carlos de la Nava, justo por detrás de Marcos Mendes.

El dibujo le dio a los alicantinos mucha posesión, buena salida, buena presión alta, pero sin lograr con ello presencia en el área del Cartagena. Un remate muy claro desaprovechado y un mano a mano del delantero africano que no acertó a resolver fue el bagaje ofensivo más sobresaliente de la primera parte.

Sustituciones en bloque

En la segunda, después del susto, Torrecilla sustituyó de una tacada a Samu, Juanmi, Josema, Candelas, De la Nava, Mangada, Roger, Ketu y Mendes por Sergi Molina, Guti, Míchel, Jean Paul, Cissé, De Palmas, César Moreno, Artiles y Nico Ortiz. El encuentro se trabó algo más, aunque persistió el dominio blanquiazul. Fruto de esta superioridad se produjo el saque de esquina que dio pie al tanto del triunfo del Hércules, el tercero en cinco partidos, todos por la mínima y dos de ellos con protagonismo de Guti.

El juvenil Guti da al Hércules la segunda victoria en Santa Pola (0-1)

El canterano leyó bien un mal despeje del Cartagena tras la ejecución del córner de Míchel y, anticipándose a todos, apareció en el corazón del área para, con un disparo seco y colocado, firmar el 0–1 definitivo. Después, el árbitro le anuló un tanto a Jean Paul por presunto fuera de juego. El delantero francés, subido de revoluciones sin explicación aparente (ni razonable), se encaró con un rival y, en mitad del tumulto formado alrededor de los dos en el conato de pelea, soltó un empujón que le costó la cartulina roja, la tercera que ve como integrante del primer equipo en menos de un año. El Hércules vuelve a jugar el sábado (día 19), esta vez frente al Atlético Baleares. Será en Palma, a las 20 horas.