Torrecilla: «No se habla de si llega la posible derrota, eso es para los débiles»

El entrenador del Hércules asegura que en su vestuario solo se habla de ganar, pero de hacerlo «con humildad, sin sacar pecho porque te lo parten»

El técnico tiene muy claro el plan en Sant Andreu: "Si no podemos ganar, no deberíamos perder"

Rubén Torrecilla, en la rueda de prensa previa al Sant Andreu-Hércules de la jornada 4 en Segunda RFEF.

Rubén Torrecilla, en la rueda de prensa previa al Sant Andreu-Hércules de la jornada 4 en Segunda RFEF. / INFORMACIÓN

Pedro Rojas

Pedro Rojas

Adelantarse al futuro no sirve de mucho, y además provoca ansiedad. Rubén Torrecilla lo tiene asumido, por eso no pierde ni un segundo en pensar qué hará cuando el equipo rompa su racha de triunfos, que algún día la romperá por pura lógica existencial: «Hablar de la derrota es para los débiles. Nosotros hablamos de las cosas a mejorar, de lo que hicimos mal en el último partido... Subrayamos lo que nos funciona bien para seguir haciendo hincapié. De las derrotas no se hablará hasta que no lleguen», asegura con vehemencia el técnico del Hércules.

«Ahora es el momento de ser humildes, de seguir trabajando igual de bien, de no sacar pecho para que no nos lo parta nadie y de corresponder al escudo que llevamos en el pecho. Mono de faena puesto, pico y pala y salir a ganar en Sant Andreu, eso es de lo que toca hablar ahora», redunda el preparador cacereño.

Después de enlazar tres victorias de inicio, los blanquiazules regresan al caucho. En el Narcís Sala aguarda el césped artificial y una hinchada deseosa de que el equipo de su barrio supere al Hércules: «No perder es la esencia del fútbol. Es importantísimo. Es fundamental. Hay que sumar siempre, así que si no puedes ganar, no pierdas. El más regular es quien más opciones tiene de lograr el objetivo. Nuestra idea siempre es salir a ganar, pero luego, en función de cómo vaya el partido, haremos una cosa u otra con la idea clara de sumar», avisa el técnico.

«No perder es la esencia del fútbol. Es fundamental. Hay que sumar siempre, así que si no puedes ganar, un día, no pierdas»

«Los resultados del Sant Andreu no son un reflejo de su juego. Han encajado muchos goles, pero por momentos han sido muy superiores a sus adversarios. Es un campo con muy ambiente, en el que la afición empuja, y tenemos que hacer muy bien las cosas para ganar allí. Que hayan perdido dos partidos no indica nada porque juegan bien al fútbol. Les gusta atacar, acumular gente por dentro, así que habrá que defender muy bien y llevar el partido a nuestro terreno. Debemos disfrutar compitiendo», aclara Torrecilla.

Haber superado los 7.000 abonados, viniendo el club de donde viene, ha sido en buena parte por la propuesta del entrenador: «Estamos consiguiendo que la grada se identifique con el equipo. No tenía ninguna duda de que sería así porque esta afición siempre responde. Somos un bloque duro, competitivo, lleno de currantes, y eso hace que cada vez se sume más gente al proyecto porque es fácil identificarse con un equipo así, humilde, que disfruta compitiendo, que no se guarda nada».

¿Sin tirador asignado?

La situación vivida sobre el césped el domingo pasado tras la señalización del penalti a favor de los alicantinos, con Alvarito y Mendes pugnando por ser el lanzador dejó un regusto amargo en la grada. El madrileño parecía el elegido, él se encargó de ejecutar el primero la semana anterior, pero Torrecilla reveló que no existía ninguna directriz oficial al respecto. «Lo gestionan ellos dentro del campo. Tenemos cinco lanzadores buenos y cualquiera puede asumir esa responsabilidad si está mentalmente en condiciones, si no ha cometido errores hasta ese instante y se siente bien».

«El que quiera ganarnos tendrá que sudar sangre, han de respetarnos más por los difícil que somos de batir que por el escudo»

A pesar de eso, el preparador blanquiazul es consciente que no se debería volver a repetir, que no es una buena imagen para un colectivo que tiene en la unidad del grupo uno de sus valores: «No va a volver a suceder. Cuando algo así pasa es fruto del hambre del jugador. Prefiero una disputa por eso que ver como se esconden los tiradores, que me ha pasado en otros equipos. Pero ya está resuelto y no volverá a ocurrir».

Por primera vez en un lustro, la ilusión es real: «Es normal que, cuando en un club las decepciones se acumulan, siempre haya quien piense que al final todo acabará como siempre, mal. Pero nosotros estamos tratando de que los futbolistas no pierdan tiempo en eso, que se diviertan con su trabajo, que lo disfruten. Así es como se logra todo. El que quiera ganarnos tendrá que sudar sangre, esa es nuestra esencia... y la de este deporte. Tenemos que conseguir que nos respeten más por lo difíciles que somos de batir que por el escudo».