El Hércules lleva la defensa al límite

Pocas cosas tiene más claras Rubén Torrecilla que los integrantes de su defensa. Sea por convencimiento o por falta de competencia, lo cierto es que el preparador blanquiazul ha repetido en las seis jornadas de liga a los mismos zagueros y solo a uno de ellos le ha dejado descansar, únicamente fueron 19 minutos porque el mismo jugador solicitó su remplazo al sentir una pequeña sobrecarga muscular. 

Samu Vázquez, Juanmi García, y Josema Gómez han jugado completos todos los encuentros del campeonato. Han permanecido sobre el césped los 540 minutos que se llevan jugados en el arranque de la competición. Candelas cedió su sitio en la banda al joven Hugo Sanz en Formentera, pero lo hizo de manera testimonial porque lleva en sus piernas 521 minutos.

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El preparador del Hércules, en el 4-2-3-1 con el que más le gusta competir, tiene asignadas las posiciones de atrás desde el primer día. La única modificación la realizó en Sant Miquel de Balansat, en la jornada seis, añadiendo una pieza más entre sus dos centrales titulares. Ryan Nolan, que solo ha faltado a una convocatoria, se incrustó entre ellos para dar solidez a la contención en un campo menguante en el que el balón, casi sin buscarlo, pasa mucho tiempo en el área y sus inmediaciones.

Números de campeón

La efectividad del sistema defensivo del Hércules, que implica a todos los futbolistas, cada uno en su parcela, está a un nivel alto. Solo cinco goles encajados y tres de ellos en un mismo partido, el que disputó en el Narcís Salas frente al Sant Andreu, la única derrota de los alicantinos en las primeras seis fechas.

Tres veces ha acabado sin encajar goles, lo que convierte lo sucedido en Barcelona, tal y como defendía el técnico, en un accidente. Las opciones de ascenso en la cuarta categoría pasan por no cometer errores groseros detrás y, de momento, el entrenador blanquiazul ha dado con la forma de lograrlo. Sin embargo, puede que el precio empiece a ser alto porque está exprimiendo al máximo a los cuatro zagueros titulares.

Torrecilla necesita unir a su fundamento destructivo a la segunda unidad. Además del central irlandés, deben tener presencia en el juego David López-Guerrero, Sergi Molina y Hugo Sanz. Ninguno de los tres acostumbra a estar ni en el banquillo. El primero no ha sido suplente ni una vez y los otros dos solo han estado con el equipo en una ocasión.

El canterano que debe dar el relevo a Samu se ha recuperado de su lesión y participa con normalidad en las sesiones de trabajo desde hace 15 días. Por su parte, el lateral zurdo, cedido por el Real Murcia, llegó en el tramo final del mercado convencido de poder sumar. Jugó 19 minutos en Formentera y desapareció de las listas de 18.

El caso de Molina es más preocupante porque ocupa ficha profesional. Torrecilla decidió quedarse con él después de tenerle a prueba todo el verano, pero aún no ha gozado de oportunidades. Entró en la última convocatoria porque el técnico tenía claro que alinearía de inicio a tres hombres en el eje de la zaga. Llegarán las suspensiones por amonestación, las lesiones (más probables cuanto más horas de vuelo se acumulen) y habrá que tener a todos activados. Con solo 11 valientes no se puede ser campeón.