José Antonio Ricart, presidente del Partido Popular en Bigastro calificó ayer como "irresponsable" el anuncio de la alcaldesa Charo Bañuls (PP) de pasarse al grupo mixto si el PP provincial o regional no pacifica las filas de la agrupación local. Las declaraciones las hizo la primera edil al verse excluida, tras una votación, de los dos puestos de compromisarios que representarán a la formación en el Congreso Regional del PP y que serán cubiertos por el propio Ricart y el secretario, José Manuel Sánchez.

Según Ricart, la asamblea se convocó en tiempo y forma y con todas las formalidades que exigía la dirección del PP. "Estamos siguiendo las orientaciones de la dirección provincial en este sentido", aseguró el ex edil. Ricart negó que Bañuls no recibiera la notificación de la asamblea y explicó que no hubo participación de militantes de otros partidos -Bañuls citó la presencia de simpatizantes del grupo independiente de Aurelio Murcia-. Otra cosa, aseguró, es que hasta la sede popular se acerquen militantes de otras formaciones.

No parece que las posturas entre ambos sectores del PP en este pequeño municipio sean reconciliables a corto plazo. Tanto Bañuls como Ricart aseguran que han sufrido presiones y amenazas del "bando" opuesto, según indicaron fuentes populares, pese a que se trata de un pulso interno y en esta ocasión no estaban en juego grandes decisiones: los compromisarios no serán determinantes en un congreso con una sola candidatura: la de Alberto Fabra, presidente de la Generalitat.

Ricart dijo que se considera "una persona honesta y honrada. Cada uno es responsable de sus actos y además de parecer honrado ha de serlo", dijo en un mensaje dirigido claramente a Bañuls y sus seguidores. El presidente dijo que una pequeña parte de la militancia del PP "tiene miedo" a que "se siga desvelando información y que se sepa que mucha gente "mojó" de José Joaquín Moya (el exalcalde socialista que gobernó el municipio durante más de dos décadas y que salió del cargo salpicado por casos de corrupción). Cuando el monstruo cayó todo el mundo se apuntó al carro", recordó Ricart haciendo alusión a su labor de oposición. La misma fuente dijo que al menos dos de los cinco ediles del PP ni son militantes.

Linternas

Por su parte el coordinador comarcal del PP. Rafael Vives, se preguntó qué respaldo tiene Ricart si acudieron 36 de los 273 militantes del partido en una asamblea "en la que los votos se tuvieron que contar con linterna porque la sede escogida no tenía suministro eléctrico. Según fuentes populares este conflicto se aparcará hasta la celebración del congreso provincial y la llegada de los locales en el mes de septiembre asegurando que Bañuls no convocó a sus simpatizantes para no generar conflictos.