El portavoz de CLr, Pedro Mancebo, sospecha que el alcalde Monserrate Guillén prorrogó un año la contrata a Chiringuitos del Sol para que pudieran obtener la «Q» de Calidad. El liberal recuerda que fue el primer edil el que paralizó el concurso para licitar los servicios de playas que él mismo, cuando era edil de Turismo, dejó listo y solo a falta de publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia.

Una vez que Chiringuitos del Sol cumplió los siete años previstos en el contrato, Mancebo preparó un pliego de condiciones para licitar el nuevo, que contó con el visto bueno del interventor, quien también aprobó el expediente de contratación sólo cinco días después de que Guillén expulsara al liberal del equipo de gobierno el 31 de enero de 2013. Pese a que todo estaba listo y a punto de publicarse para que las empresas concurrieran, el regidor anuló el procedimiento alegando que este contrato suponía una merma en los ingresos para el Ayuntamiento así como que el pliego de condiciones no permitía la libre concurrencia de empresas ya que solicitaba que las empresas demostraran solvencia durante los tres últimos años.

En lo referente a la cuestión económica el mínimo que incluyó el liberal en su pliego de condiciones para las ofertas económicas de las empresas estaba fijado en 321.485,11 euros (alrededor de 120.000 euros más que el pliego de 2006) mientras que Guillén solo elevó esa cifra hasta los 350.000 euros pese a que había señalado que las condiciones económicas iban a afectar a las arcas municipales. Asimismo mientras que Guillén consideró restrictivo que las empresas demostraran su solvencia, entre las nuevas condiciones del pliego se encontraba la de estar en posesión de la «Q» de Calidad, un certificado que solo tenían dos empresas en España (Chiringuitos del Sol y una mercantil del sector gaditana).

Para el liberal las explicaciones que dio el primer edil para anular el contrato eran «poco claras e ilógicas». En este sentido dijo que si no le gustaba el pliego de condiciones «podría haberlo cambiado en vez de anularlo y comenzar todo el proceso de nuevo». Aún así, Guillén decidió prorrogar un año más la contrata a Chiringuitos del Sol ya que el pliego de condiciones así lo permitía. Durante ese año la empresa obtuvo la «Q» de Calidad a través a través del Sistema de Calidad Turística en Destino al que está adherido el Ayuntamiento. El mismo requisito que luego fue exigido en el pliego de condiciones y que solo podían cumplir dos empresas de toda España.

Comparación

Mancebo dijo que este procedimiento «huele a Urbaser». De esta forma comparó la paralización de su procedimiento de adjudicación con el que dio origen al caso Brugal: la anulación de la contrata del servicio de recogida de residuos urbanos a Urbaser y la posterior adjudicación a la UTE compuesta por las empresas Sufi, Liasur y Gobancast. En este sentido el concejal criticó que el alcalde «quiera lavarse las manos y decir que todo depende de la mesa de contratación cuando fue él mismo quien paralizó el contrato y sacó un nuevo pliego de condiciones junto a la edil Martina Scheurer». De hecho, el liberal volvió a recordar que la empresa que Chiringuitos del Sol adeuda más un millón de al Ayuntamiento «y de eso era consciente el alcalde desde octubre de 2013» por lo que se pregunta por qué la empresa pasó todas las mesas de contratación pese a que el pliego de condiciones especifica claramente que la adjudicataria no puede mantener deudas con la ciudad «y Guillén no hace nada». Tanto la empresa como el propio Ayuntamiento siguen sin hacer declaraciones a este respecto.