El Campello aprueba de forma definitiva el proyecto de transporte público de la zona norte y garantiza el futuro de este servicio, que está en funcionamiento desde el pasado mandato. El pleno dio el visto bueno en una sesión extraordinaria este lunes al reglamento del servicio público municipal de transporte de viajeros por carretera, en el que se concreta la gestión del servicio y se recogen las normas que determinarán los derechos y deberes de los usuarios, así como el régimen sancionador. Con ello se pretende afianzar y dar estabilidad a este servicio, así como darle continuidad a largo plazo, según explicó el edil de Contratación, Javier Martín (Cs).
La aprobación inicial de esta reglamentación se llevó a cabo en abril, con los votos favorables de PP, Cs y Vox y las abstenciones de PSPV, Compromís, EU y Redcv. Y este lunes fue aprobado de forma definitiva con los votos de PP, Cs, Compromís, Red, y la abstención de PSOE y EU.
Gestora de Vecinos
El documento sobre la ordenación del servicio ha estado en exposición pública, sin que se hayan aceptado las alegaciones presentadas por la Gestora de Asociaciones de Vecinos, que reclamaba el acondicionamiento de la paradas y la mejora de su accesibilidad, renovación de la señalética y la instalación de marquesinas en las principales paradas.
Desde el consistorio han destacado que para la elaboración de este reglamento se ha priorizado la calidad de vida de las personas con la configuración de un servicio accesible «en un entorno amigable, seguro y confortable». Por este motivo, esta normativa establece los requisitos de accesibilidad, cumpliendo las condiciones y especificaciones para cada uno de los momentos y espacios de la cadena de transporte, y teniendo presente las infraestructuras o instalaciones fijas, vehículos, sistemas de información, señalización, orientación, así como la prestación del servicio propiamente dicho.
Así mismo, se ha tenido presente el contexto normativo derivado de la pandemia del covid-19. Así, el reglamento establece una serie de medidas a adoptar tanto por las empresas que presten el servicio como por los viajeros. En todo caso, estas medidas serán actualizadas en función de las disposiciones que las distintas administraciones vayan adoptando según la evolución de la situación epidemiológica y sanitaria.
