Descubre dónde se ubican las 325 viviendas de la Sareb cuya compra ultima el Consell

El anuncio de Pedro Sánchez de que el Gobierno sacará a la palestra hasta 50.000 viviendas de la Sareb para convertirlas en públicas y destinarlas a alquiler asequible no pilló por sorpresa a la Generalitat, que ya llevaba tiempo explorando ese camino. De hecho, hace poco más de un mes la Conselleria de Vivienda selló un acuerdo con este organismo semipúblico, que gestiona los activos inmobiliarios de los que tuvieron que desprenderse los grandes bancos y cajas de ahorro durante la crisis financiera, para hacerse con 585 viviendas de su propiedad e incorporarlas al parque público valenciano.

Para llevar a cabo la operación, que todavía no está cerrada, los técnicos del departamento que dirige el vicepresidente segundo, Héctor Illueca, inspeccionaron más de 1.700 pisos propiedad de la Sareb en la Comunidad Valenciana para ver cuáles se amoldaban a los requisitos para ser convertidos en públicos.

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Según los datos del propio ente, el 'banco malo' concentra en la autonomía casi 9.000 viviendas, un 20 % de su catálogo nacional, consecuencia del profundo impacto que tuvo en la Comunidad Valenciana la crisis financiera de 2008, que hace que buena parte de las propiedades de la Sareb se acumulen en la autonomía.

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Pero el Consell estima que aproximadamente un tercio son inservibles para este fin ya sea por su estado, ubicación, características o precio. Asimismo, de las 6.000 restantes, cerca de la mitad estarían ya en condiciones de habitabilidad y la otra mitad requeriría de rehabilitación. De lograr movilizarlas todas, se conseguiría reducir a la mitad la lista de espera, que supera las 13.000 personas.

De la criba inicial que realizó Vivienda, que preseleccionó esos 585 de los 1.700 pisos ofrecidos por la Sareb, 325 ya están en la última fase de inspección y tasación antes de oficializarse la compra. Este diario ha tenido acceso a dónde se ubica cada una de estas viviendas, un directorio del que se pueden extraer las primeras conclusiones de cómo se distribuyen los inmuebles del banco malo por la autonomía.

Las zonas tensionadas del alquiler

Las 325 viviendas que el Consell está a punto de sumar a su parque público se reparten por 47 municipios de las tres provincias. Valencia es la que mayor oferta concentraría, con 182 pisos; en Alicante se adquirirían otros 91 y en Castellón, 52.

La inmensa mayoría, casi un 90 % del total, están localizadas en zonas tensionadas. Se considera "zona tensionada" aquel inmueble ubicado en un municipio donde la carga mediana del coste de la hipoteca o alquiler suponga más de un 30 % de los ingresos de los hogares y donde el precio de compra o alquiler haya crecido en los cinco años anteriores un 3 % más que el aumento del IPC.

Así, de los 325 pisos, 184 (más de la mitad) están en zonas consideradas como de "alta" necesidad de vivienda y 102 registran una necesidad "media". Solo 37 están en territorios no saturados (L'Eliana, Altea o Benidorm). Igualmente, más de un tercio (58 casas) se ubican en grandes municipios de más de 50.000 habitantes.

Por ejemplo, la operación contempla la compra de 30 viviendas en València (el segundo municipio con mayor oferta por detrás de la Font d'En Carrós, con 33), 25 en Castelló de la Plana, 17 en Requena, 15 en El Campello, 12 en Alcoy, seis en Paterna o tres en Gandia, Alicante, Sagunt, Torrevieja o Borriana, todas ellas localidades consideradas como "muy tensionadas".

Buena muestra de esa tensión se refleja en las cifras de demandantes de una vivienda pública. Solo en València hay más de 3.600 personas registradas para esa oferta de 30 pisos, mientras en Alicante son 2.300 para tres hogares. En total, hay más de 16.000 aspirantes para esas 325 casas.