Voluntarios retiran "basuraleza" del Clot de Galvany

El gesto de ir a la playa, poner la hamaca y comerte un bocadillo mirando las olas puede tener un impacto negativo si cuando acabas ese plácido momento el papel de aluminio que envolvía la comida se queda ahí entre la arena. Y aunque cada vez haya más conciencia ciudadana, siguen existiendo ciudadanos que creen que el botellín que se bebieron o el paquete vacío del tabaco que se fumaron puede formar parte del medio ambiente.

Para romper con la falta de civismo, este domingo más de una veintena de voluntarios se han remangado el chándal para retirar residuos del Clot de Galvany en Elche, especialmente del entorno dunar próximo a la playa del Carabassí. La jornada se ha visto ciertamente deslucida por el viento, aunque los participantes lo han dado todo para ver limpio el entorno.

Actividades

La cita estaba organizada por el Ayuntamiento y Aigües d'Elx en el marco de unas actividades europeas para preservar espacios protegidos. La jornada, bajo el nombre "A limpiar el Clot, a limpiar el Mundo" ha servido para que hayan 43 kilos menos de residuos en ciertas zonas donde es complejo el acceso de las brigadas municipales de limpieza.

Se ha retirado desde vidrio y plásticos de pequeño tamaño hasta envases, papel y elementos de metal que estaban semienterrados en la zona. Uno de los mayores peligros es, por ejemplo, que los plásticos se vayan fragmentando, se conviertan en microplásticos y acaben en el mar, que no es tan difícil cuando se dan temporales como el de hoy con los que se vuelan restos de un sitio a otro con gran facilidad.

Entre el colectivo participante había familias al completo y jóvenes concienciados, teniendo en cuenta que también se han sumado a la actividad integrantes del Club de Leones de Elche. El reto era reducir al máximo posible los efectos que tiene la mano del hombre, y una vez terminada la actividad todos los residuos hallados se han agrupado por tipología para reciclarse después.

La gestión de las nueve charcas del Clot logra asentar especies pese a la presión urbanística

Basuraleza

Tal y como viene alertando desde hace años el proyecto Libera de Seo Bird Life, que elevó una campaña en 2018 para que la RAE recogiese el término 'basuraleza', el impacto de la basura en la naturaleza sobre la vida silvestre es evidente. Sólo hasta 2016 se contabilizaban 800 especies afectadas y superan el millar las marinas y actuáticas asociadas a estos residuos. Indican que la incidencia es especialmente grave en el caso de fauna y flora amenazada.

Se estima que un 17% de las especies afectadas por la basuraleza forma parte de la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), y hay que tener en cuenta que en parajes como el Clot hay especies en riesgo de extinción como la cerceta pardilla, de ahí que sea necesaria la continua gestión del agua de las charcas, trabajo del que se encarga Aigües d'Elx, y que los residuos no invadan las zonas de asentamiento de los animales.