Un 30% de los votantes decidirá en la última semana el color del Consell

Los partidos se vuelcan para convencer a los indecisos, que pueden resultar más influyentes que nunca por lo ajustado de los sondeos. Los jóvenes, de tendencia mayormente progresista, son otro de los objetivos

Un hombre eligiendo la papeleta de la formación política a la que quiere votar en un colegio electoral.

Un hombre eligiendo la papeleta de la formación política a la que quiere votar en un colegio electoral. / Alex Dominguez

M. Vilaplana

M. Vilaplana

Es un sector del electorado que siempre ha estado en el punto de mira de las formaciones políticas, debido a que todavía no tiene el voto decidido y puede acabar sumándose a su causa. En estas elecciones, sin embargo, el interés por tratar de convencer a los indecisos se ha multiplicado de forma exponencial, toda vez que pueden resultar decisivos en el resultado de los comicios autonómicos, a la vista de lo apretado de los sondeos. Y es que se calcula que serán alrededor de un 30% los votantes que esperarán a la semana previa al 28M para concretar a qué partido apoyan, un porcentaje más que suficiente para decantar la balanza hacia un lado u otro. Los jóvenes, por otro lado, son otro de los colectivos a los que los políticos están tratando de convencer, si bien, según los expertos, parten de una tendencia mayormente progresista.

La mayoría de los sondeos publicados hasta el momento indican que el color del próximo Gobierno de la Comunidad Valenciana se va a decidir por un puñado de votos. Todo va a depender de si Unides Podem es capaz de conseguir sobrepasar la barrera del 5%, porcentaje mínimo que se exige para obtener representación en las Cortes. Si eso es así, la reedición del Botànic, con el tripartito de izquierdas, estaría más cerca, mientras que, en caso contrario, sería la derecha, con el PP al frente, la que tendría todos los números para hacerse con la presidencia de la Generalitat.

Pues bien, en este contexto tan apretado, los indecisos van a tener una importancia extraordinaria en el resultado de las elecciones. Se calcula, al igual que ha venido pasando en las últimas elecciones, que alrededor de una tercera parte de los votantes van a decidir su papeleta en la última semana, y eso no es un porcentaje menor. Tomando como referencia el nivel de participación alcanzado en los últimos comicios, serían alrededor de 828.000 los electores del conjunto de la Comunidad que se encontrarían en esta situación, 280.000 en el caso de la provincia de Alicante. Los indecisos también van a tener importancia en los resultados de las elecciones municipales, aunque, en este caso, todo dependerá de la diferencia de apoyos que exista entre la izquierda y la derecha en cada uno de los municipios.

Mayoría de edad

El otro colectivo que también puede tener una influencia notable es el de los jóvenes, principalmente los que van a votar por primera vez en esta convocatoria al haber cumplido la mayoría de edad y que, por tanto, van a tener que decidir a quien prestan su apoyo. A nivel autonómico alcanzan los 186.971, mientras que en el ámbito provincial son 59.550.

¿Y qué es lo que opinan los expertos sobre el comportamiento de estos dos grupos? Carlos Gómez Gil, sociólogo y profesor de la Universidad de Alicante (UA), señala que el 30% de indecisos es un porcentaje que ha venido siendo habitual en los últimos comicios celebrados tanto a nivel nacional como autonómico, y que no tiene una explicación más allá de que se trata de personas que se dejan para el final la toma de decisiones. Según sus palabras, «hay electores totalmente convencidos y politizados, que tienen clara su ideología y el partido al que van a votar desde el principio, pero aquí estamos hablando de gente que, al igual que hace con otras cosas, como por ejemplo ir a hacer la compra, no se lo plantea hasta que los comicios ya están a la vuelta de la esquina y debe tomar una decisión. Por tanto, no estamos ante un proceso de indefinición consciente, sino que las cosas vienen así».

Sea como fuere, el elevado porcentaje de indecisos propicia, añade Gómez Gil, que sea muy importante movilizar a los electorados. Y aquí entran en juego las diferentes tácticas que utilizan las formaciones políticas. Como ya destacó en su momento el profesor de la UA, la izquierda está tratando de vender la gestión realizada desde el ejecutivo autonómico del Botànic, mientras que la derecha, apunta , «apela más a las tripas y a la crítica basada en lo nacional. Una prueba de ello la estamos teniendo ahora con las continuas referencias a Bildu y al terrorismo».

¿Y qué es lo que puede ofrecer mejores resultados? Gómez Gil destaca que la táctica de la derecha, la que define como «voto eléctrico», puede funcionar mejor en las grandes urbes, donde, señala, «pueden calar más los malestares que genera la política nacional». Sin embargo, añade, «en los municipios de menor tamaño tengo dudas de que pueda movilizar el voto, porque pesa más la cercanía y lo que sucede a nivel de gestión». Y eso en una comunidad en la que, subraya, «realmente solo contamos con una gran urbe, como es València, dado que la que le sigue a continuación, como es Alicante, es de un tamaño medio y con una estructura de barrios muy marcada, en la que también la proximidad y el conocimiento de lo cercano es lo que prima».

Con relación al voto joven, Gómez Gil señala que, al contrario de lo que se pudiera pensar, es un colectivo que sí que acude a los colegios electorales. Según las encuestas realizadas, de los electores que tienen claro que no van a votar, solo un 2,5% son jóvenes, frente al 3,4% de las personas de 55 a 64 años, o al 3,7% de los mayores de 75. En lo que respecta a su orientación política, el experto señala que, teniendo en cuenta que es un grupo de electores especialmente afectado por el desempleo o los problemas de acceso a la vivienda, cabe pensar que respaldarán a aquellas formaciones políticas que les brinden soluciones creíbles. Aunque partiendo de la base de que cuentan con un perfil mayormente progresista. «Estamos hablando de una juventud abierta, que tiene muy claros conceptos como la igualdad de género o el reconocimiento del colectivo LGTB. Se trata, por tanto, de un colectivo que se decanta más hacia la izquierda que hacia la derecha, ideología que encuentra más acomodo en las personas de mayor edad. Se podría decir que la gente se va volviendo más conservadora a medida envejece», enfatiza.

Bipartidismo

Por su parte, Lluís Catalá, profesor del departamento de Sociología de la propia Universidad de Alicante (UA), destaca que, pese a que el porcentaje de indecisos es alto, se ha ido reduciendo de forma paulatina. Según explica, «había más personas que no sabían a quien votar cuando el bipartidismo estaba totalmente implantado, dado que no encontraban una opción válida que respondiera a sus exigencias». Sin embargo, añade, esta situación ha tendido a cambiar con la irrupción de otras formaciones políticas más recientes, empezando por Podemos, que han abierto más el abanico y ofrecido más posibilidades y matices a los electores.

En lo que respecta a la juventud, Catalá cree que en gran parte se trata de un voto hasta cierto punto rebelde, que no recala necesariamente en los partidos mayoritarios. «Hablamos de chicas y chicos que no han votado antes, por lo que las únicas referencias políticas que tienen son la de los partidos de gobierno y oposición actuales. Así que los que tiendan a votar a la izquierda, seguramente se decanten por apoyar a un partido que entiendan más novedoso, como es Compromís, que al PSOE. Lo mismo puede suceder en la derecha, aunque en este caso tirando por Vox, en lugar de votar al PP», enfatiza.

El profesor de la UA, en este mismo sentido, resalta que el voto juvenil es más rebelde que el de los mayores. Según sus palabras, «están en modo respuesta, van más a la contra. El voto jubilado, en cambio, es más conservador, y eso se ha puesto de manifiesto en el apoyo que ha prestado este colectivo a aquellas formaciones políticas que, por ejemplo, les ofrecen mayores garantías en el cobro de sus pensiones».

Sea como fuere, lo cierto es que todos los partidos se están volcando para tratar de convencer a los indecisos, así como también a aquellos electores que se van a estrenar en los próximos comicios. Desde el PSPV-PSOE destacan la campaña que están llevando a cabo recorriendo todas las comarcas de la Comunidad para contraponer ideas, todo ello con una intensa presencia en las redes sociales. En parecidos términos se expresan en el PPCV, donde ponen en valor las más de 2,000 acciones realizadas con diferentes colectivos para confeccionar el programa de gobierno. En Ciudadanos han situado a los indecisos en el centro de su discurso, al entender que mayoritariamente forman parte del espacio electoral, en la misma línea que Compromís, que al igual que al inicio de la campaña se centró en movilizar a su electorado habitual, ahora las propuestas van dirigidas principalmente a este colectivo. Vox, por su parte, también se centra en el mensaje, exponiendo la gestión que están llevando a cabo en la única autonomía donde tienen competencias de gobierno, como es Castilla y León. Unides Podem, por último, está centrando su campaña en las plazas y barrios de las ciudades, dando a conocer la gestión y a sus candidatos

Acciones de los partidos para movilizar a los indecisos y la juventud

PSPV

Gira del candidato Ximo Puig y otros cargos del partido por toda la Comunidad para contraponer ideas y escuchar propuestas, haciendo partícipe a la ciudadanía del proyecto. Fuerte presencia también en las redes sociales para interpelar directamente a los votantes y reparto de panfletos en mercados, así como puerta a puerta en algunos lugares.

PP

Desde principios de noviembre el PPCV está desarrollando una intensa agenda de visitas a municipios, así como de reuniones con vecinos, asociaciones, organismos y sectores productivos. Durante este tiempo se han llevado a cabo más de 2.000 acciones que han servido para confeccionar el programa. Durante los últimos 15 días han incrementado la actividad.

Ciudadanos

Ciudadanos ha puesto a los indecisos en el centro de su discurso, al entender que la mayoría forma parte de su espacio electoral. El mensaje, en los diferentes actos que organizan desde la formación naranja, es que son necesarios para que ningún gobierno más tenga que apoyarse en radicalismos. También les explican la labor desempeñada por el partido.

Compromís

Compromís, fruto de los estudios propios realizados, arrancó la precampaña movilizando a su electorado habitual, aunque ahora ha dado un giro para centrar los mensajes en tratar de convencer a los indecisos. A once días para las elecciones, las propuestas van dirigidas a aquellas personas que no tienen decidido su voto para que se decanten por los valencianistas.

Vox

Vox también le está prestando una atención especial a los indecisos, y para ello, según explican desde el partido, la garantía que ofrecen es el cumplimiento del programa. Y ponen como ejemplo la gestión que desarrollan en Castilla y León, única comunidad en la que tienen competencias de gobierno, donde, afirman, ha mejorado la calidad de vida de los ciudadanos.

Unides Podem

Unides Podem esta llevando a cabo numerosos actos en las plazas y los barrios de las ciudades para difundir la gestión realizada en el seno del Botànic y dar a conocer a sus candidatos. El objetivo es resaltar la importancia de políticas como las de vivienda, dirigidas a que tanto los jóvenes como la ciudadanía en general pueda acceder a la misma a precios asequibles.