La Federación Española de Cáncer de Mama protestará ante Sanidad por el retraso en las pruebas

El Sindicato Médico señala que la falta de radiólogos está detrás de la eliminación de la segunda lectura en las mamografías

Una paciente se somete a una mamografía

Una paciente se somete a una mamografía / INFORMACIÓN

J. Hernández

J. Hernández

La Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA) presentará una reclamación ante la Conselleria de Sanidad por las demoras de hasta tres meses entre la detección y el tratamiento en los casos de cáncer de mama que han hecho públicas las asociaciones de pacientes de la provincia. Aunque fuentes del Consell rechazan que haya retrasos en lo que se denomina "diagnóstico prueba a prueba", los hospitales tienen un protocolo de actuación de ocho semanas, según confirmaron fuentes hospitalarias.

La reclamación la promueve la Asociación Provincial de Alicante de Mujeres con Cáncer de Mama (APAMM), que acude a la federación para hacer fuerza y conseguir el apoyo de otras asociaciones de pacientes de la Comunidad Valenciana "porque afecta a muchas más y es algo muy grave cuando estás en un proceso así, tan mal y tan perdida, hay que ponerse en el lugar de las mujeres que esperan el diagnóstico, qué miedo", señala la presidenta de la entidad, Loreto Brotons, que quiere llevar todas las reivindicaciones ante las instituciones autonómicas a través de la federación nacional.

"Es algo muy grave cuando estás en un proceso así, tan mal y tan perdida, hay que ponerse en el lugar de las mujeres que esperan el diagnóstico"

Loreto Brotons

— Presidenta de APAMM

La situación que denuncian varias asociaciones de pacientes de la provincia afecta a pruebas como resonancias magnéticas, ecografías o PET TACs (que consiste en obtener imágenes a través de la medicina nuclear inyectando radiofármacos). Estas pruebas que se realizan una vez detectado el cáncer de mama son las que determinan la opción más idónea para cada paciente, como puede ser una intervención quirúrgica y el tratamiento posterior de quimioterapia y/o radioterapia.

Las afectadas aseguran que también se están produciendo demoras en las cirugías para reconstrucción mamaria de entre uno y dos años, y que las revisiones que se realizan a las mujeres que han superado la enfermedad se están espaciando más allá de doce meses, tiempo recomendable para detectar a tiempo una recaída. Así lo afirman la Asociación provincial de Alicante de mujeres con Cáncer de Mama (APAMM); la Asociación de Mujeres Afectadas de Elche (Amacmec) y Anémona, Grupo de Autoayuda para Mujeres con Cáncer de Mama de la Marina Baixa.

Sobre la negativa de Sanidad a que se estén produciendo estos retrasos, desde APAMM responden: "que vengan a decírnoslo a la asociación". Entienden que en la etapa del covid se produjeran demoras "pero lo hemos normalizado. La Sanidad pública tarda. Y no hay que esperar a la biopsia, con cualquier sospecha tumoral que puede desembocar en quimio o en quirófano tres meses es mucho; y que te dejen sin pecho tres años (por los retrasos en la reconstrucción mamaria) es algo muy traumático, se te queda toda la vida en la cabeza. Con las técnicas de screening se llega al resultado final, son las que indican qué tipo de tumor es porque no en todas es igual, en unas es hormonal, en otras genético...".

"Que te dejen sin pecho tres años (por los retrasos en la reconstrucción mamaria) es algo muy traumático, se te queda toda la vida en la cabeza"

Loreto Brotons

— Presidenta de APAMM

A pesar de esta dilación, la asociación pone en valor la atención médica, "son profesionales muy competentes pero si los recortan...El problema no es de especialistas, son los tiempos".

Doble lectura de las mamografías

Asimismo, la presidenta de APAMM considera que no tiene que haber sospecha de cáncer para hacer la doble lectura de las mamografías, eliminada el pasado 1 de marzo por la Conselleria de Sanidad, sino que precisamente las pruebas se cruzaban para eliminar esa sospecha.

Sanidad justificó la supresión de la segunda lectura en que se siguen protocolos europeos y que la Guía de Calidad del Cáncer de Mama y Colorrectal de la Comisión Europea recomienda especialmente la doble lectura cuando quienes valoran las mamografías son radiólogos no expertos (realizan menos de 3.500 estudios al año). Asimismo, desde la Conselleria indicaron que en caso de una mínima duda sobre los resultados "se harán las lecturas y revisiones necesarias".

A este asunto se ha referido el Sindicato Médico en un comunicado, en el que critica la eliminación de la segunda lectura en los diagnósticos de las mamografías porque, según ha subrayado, "puede dar lugar a un retraso en el diagnóstico precoz del cáncer de mama", a la vez que lo achaca a la falta de radiólogos. Algo que niega Sanidad.

La organización lamenta que la Conselleria, "con la excusa de no disponer de radiólogos suficientes para la totalidad de Unidades de Prevención del Cáncer de Mama, despide a todos los radiólogos que realizan la segunda lectura de mamografías igualando a la baja la calidad y seguridad del Programa de Cribado del Cáncer de Mama".

En este sentido, apuntan que el desarrollo del Programa de Prevención del Cáncer de Mama está regulado en la Orden 4/2021, de 29 de octubre de la Conselleria de Sanidad que es de aplicación a todas las mujeres comprendidas entre 45 y 69 años, teniendo previsto y anunciado ampliaciones progresivas hasta los 74 años.

En la metodología del programa, dicha orden establece que las mujeres deben ser citadas para cribado cada 24 meses, que se les realizará un estudio mamográfico bilateral en 2 proyecciones y se le realizará una doble lectura en la que debe haber consenso. En caso de que no lo haya, se deberá hacer una nueva valoración para la confirmación del diagnóstico.

Desde el Sindicato, censuran "la eliminación de la segunda lectura mamográfica en todas las unidades de prevención, incluso en aquellas que contaban con radiólogo segundo lector, lo que evidentemente reducía de manera significativa los falsos diagnósticos, tanto en positivo como en negativo, y que esta decisión incumple las recomendaciones de garantía de calidad y seguridad del programa, infringiendo la normativa que regula su desarrollo".

"No parece muy lógico que se amplíe la oferta a franjas de edad mayores, aunque podamos estar de acuerdo con ello, sin tener garantías para ofertar el servicio en condiciones a la población diana actual. La eliminación de la segunda lectura puede dar lugar a un retraso en el diagnóstico precoz de este cáncer, en el cual la supervivencia de las mujeres a los 5 años de su diagnóstico es del 85%, supervivencia que aumenta cuando más precoz es el diagnóstico", concluyen.