Los sueldos de los diputados notan la brecha generacional

Tres de los cuatro representantes que menos cobraron en 2022, antes de entrar en política, tienen menos de 30 años

Imagen del pleno de las Corts.

Imagen del pleno de las Corts. / JOSÉ CUÉLLAR/CORTS

A partir de ahora su salario base será el mismo (aunque los complementos provocarán variaciones), pero hasta asumir su acta como diputados, la edad se ha hecho notar en sus rentas. La brecha generacional se evidencia en los novatos de las Corts y en los sueldos que percibieron antes de entrar en la cámara autonómico. Los parlamentarios más jóvenes son, de manera general, los que menos cobraron en 2022 según se desprende de la declaración de rentas que han hecho en su toma de posesión del escaño.

Lucía PeralCandela Anglés y Cristina Martínez coinciden en tres puntos: se han estrenado esta legislatura como diputadas, no superan los 30 años y en 2022 ganaron menos que el salario mínimo, según sus declaraciones en el parlamento autonómico. Cero, 800 y 12.765 euros son los ingresos que han registrado las representantes del PPCV (las dos primeras) y del PSPV. 

Peral y Angles acabaron ese año sus respectivas carreras, estudios que compatibilizaron con cargos en la oposición en los ayuntamientos de Elx y Càlig. Por su parte, Martínez ese año fue presidenta del Consell Valencià de la Joventut. Un poco más cobraron en 2022, antes de ser diputados autonómicos, los otros dos veinteañeros del hemiciclo: MJ Calabuig, de Compromís, y José Muñoz Salvador, de Vox, con 20.846 16.552 euros. 

Los cinco no son los que menos cobraron, hay otros nombres como el valencianista Juan Bordera (10.171 euros) o la popular Adoración Llop (15.022 euros), pero sí confluyen en no haber cumplido los 30 años, haber estado el año pasado en trabajos fuera de la política y estar en la parte baja de la clasificación de los ingresos de los hoy diputados. Y estarlo, además, a mucha distancia de quienes están en la parte alta. 

Al frente de la tabla se encontraría Felipe Carrasco. Aunque su declaración aparece junto al resto de diputados, Carrasco ya no lo es tras haber sido elegido director general de Industria. Sí lo fue en 2022 cuando percibió, en total, 155.000 euros. De estos, según desgrana en su declaración —de las mejor detalladas—64.543 euros fueron de salario (en el que se encuentraría el de las Corts) y 85.603 euros fueron de su «actividad profesional». A ello se suman casi 5.000 euros de rendimientos por fondos de inversión y arrendamientos.  

Caso similar al de Carrasco es el de José Luis Aguirre, hoy conseller de Agricultura. El parlamentario de Vox la pasada legislatura —y que renunció al acta para entrar en el gobierno— es el tercero que más cobró en 2022: 103.416 euros de los que 53.471 euros son de «sueldos»; 46.457 euros de «honorarios» y más de 3.000 de «intereses y dividendos». Sí que continúa como diputado el segundo en la lista: Eduardo Dolón. En total, recibió 108.022 euros por sus cargos de alcalde de Torrevieja y diputado provincial en Alicante.

Diferencias entre diputados

El documento también evidencia que estar en la misma institución no implica mismo sueldo. Ruth Merino cobró 71.000 euros cuando era portavoz de Ciudadanos mientras que su homóloga de Vox, Ana Vega, percibió 89.000 euros, una diferencia basada principalmente en los complementos de kilometraje y el plus por acudir desde Alicante. Joan Baldoví cobró 12.000 euros más que Vicente Betoret pese a que los dos eran diputados en el Congreso y Gabriela Bravo ganó 5.000 euros más —72.725 euros— que Arcadi España cuando ambos eran consellers de Justicia y Hacienda. 

Pero más allá de las clasificaciones y las anécdotas que las envuelven, el documento publicado por las Corts guarda cierta polémica sobre la cifra total declarada. El modelo permite esconder la retribución real. Pese a que ha de presentarse junto a una declaración de Hacienda, esta solo certifica uno de los datos: la cuota líquida del Modelo 100 de IRPF, es decir, la cantidad abonada a la Agencia Tributaria.

Por ejemplo, llama la atención que Carlos Mazón haya declarado unos retribuciones por 62.519 euros cuando su sueldo como presidente de la Diputación de Alicante superaba los 85.000 euros y en la ficha de alto cargo de la Generalitat se le asume unos rendimientos de trabajo por 95.000 euros. 

Situación similar a la del conseller de Educación José Antonio Rovira quien declara en las Corts retribuciones por 52.000 euros y en GVA Oberta estas ascienden hasta los 77.000 euros o la alcaldesa de València, María José Catalá, quien también declara 54.000 euros pese a que su sueldo como concejala en el Ayuntamiento de València en 2022 fue de 74.659 euros, según el portal de transparencia del consistorio.

Otros consellers como Ruth Merino José Luis Aguirre sí que coinciden entre su declaración presentada en las Corts y la que se puede ver en el portal de GVA Oberta. También coinciden los 82.000 euros que el expresident Ximo Puig reflejaba el portal de transparencia de la Generalitat cuando era el jefe del Consell con los que ha señalado en su registro en el parlamento autonómico como diputado.