Reorganización municipal que levanta ampollas: del valenciano a los «ascensos»

Una Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Ayuntamiento de Elche que, en su día, según destacó el equipo de gobierno del PP y Vox, salió adelante «sin la oposición de los sindicatos presentes», pero que ahora, tres meses después de que se aprobara en la junta de gobierno local y haya salido publicada en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), ha levantado ampollas entre la oposición. De entrada, tanto PSOE como Compromís critican que el Ejecutivo local haya suprimido la jefatura de sección de Promoción del Valenciano. Una amortización que, para la izquierda, es un ataque más del PP y Vox contra el valenciano. Ahora bien, no es la única cuestión contra la que se han revuelto. Los socialistas van más allá y critican el gasto «superfluo» que supone la creación de nuevos puestos de coordinación de área y de jefaturas de servicio, y que, a efectos prácticos, supondrán un «ascenso» para los empleados municipales que asuman esos cargos por las retribuciones que percibirán.

La primera en salir a la palestra fue la portavoz del grupo municipal de Compromís, Esther Díez, que, a través de un comunicado, denunció los «nuevos ataques del Gobierno de Ruz al valenciano». En plural, porque lo que tachó de «ofensiva contra el valenciano» del PP y Vox en la jornada del jueves se vio reflejada, según expresó, en el cambio de la imagen institucional del Ayuntamiento y en las modificaciones en la RPT. «En ella se observa cómo el Gobierno de Pablo Ruz ha amortizado la jefatura de sección de Promoción del Valenciano, con el objetivo de desmontar la estructura funcionarial para promover el uso de nuestra lengua cooficial», dijo, para a continuación recordar, por ejemplo, la rebaja de un 30% de las partidas de promoción del valenciano para este año. «La actitud valencianófoba de Ruz es injustificable», sentenció.

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Un argumento a grandes rasgos similar al que luego expresó el PSOE por boca de la concejala Patricia Maciá. «¿Qué problema tienen con el valenciano el PP y Vox?», preguntó. «La derecha intenta acabar con el valenciano cuando muchos de sus votantes son valencianoparlantes», señaló, para, acto seguido, añadir que «no sabemos si es una imposición de Vox al PP, pero lo que está claro es que sólo han necesitado cuatro meses para cargarse este puesto». Al parecer, pasadas las elecciones del 28M, y materializado el cambio de gobierno, la empleada municipal que estaba al frente de esa jefatura pidió el traslado a otro municipio, algo que para los socialistas se habría resuelto fácilmente con tan sólo haber nombrado a otra persona para este puesto que se creó hace dos años.

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En cuanto a los nuevos cargos de coordinación y jefatura de servicio que recoge la RPT, Maciá estima que, descontando el de Promoción del Valenciano, supondrán un gasto adicional de 200.000 euros al año para las arcas municipales. Todo por los complementos que recibirán esos empleados municipales, y que van desde los 30.218 euros que se contemplan para la persona encargada de la coordinación de área de Alcaldía o de la de Acción Social, Participación o Sanidad; pasando por los 25.928 euros para quien ocupe la jefatura de servicio de contabilidad; los 20.094 euros del de Patrimonio Cultural; o los 12.171 euros para quien sea el coordinador o coordinadora de gestión de actividades agrarias. Y así hasta once puestos de nueva creación. «Lo que esto refleja una vez más es el gasto excesivo en personal que hace este equipo de gobierno, que ya desembolsa 200.000 euros al año en asesores, cuando lo que tiene que hacer es preocuparse más por un proyecto de ciudad que no tiene», subrayó Patricia Maciá.

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