Segunda RFEF

El Hércules se ahoga en un bucle de malos recuerdos

El proyecto de Torrecilla suma menos puntos que los de Sergio Mora y Lolo Escobar a estas alturas de la temporada 

Los blanquiazules, tras sumar once puntos en 11 semanas, no enlazaban seis jornadas sin ganar desde hace cinco años

Juanmi García reclama la atención de sus compañeros desde suelo del Rico Pérez.

Juanmi García reclama la atención de sus compañeros desde suelo del Rico Pérez. / Alex Domínguez

Pedro Rojas

Pedro Rojas

El Hércules sigue su descomposición sin que nadie acierte a atajar el problema. El desplome sufrido por el equipo de Rubén Torrecilla empieza a no tener parangón en la historia reciente del conjunto blanquiazul que, a pesar de todo, sigue teniendo margen suficiente como para no ver peligrar su concurso en la promoción de ascenso a pesar de que el Torrent se ha situado a 7 puntos de los alicantinos a falta de seis jornadas para el final de la fase regular.

Para retener, como mal menor, esa quinta posición que ahora ostenta va a necesitar ganar algún partido antes de que comience la postemporada, algo que ahora mismo parece muy lejano. Seis semanas lleva el Hércules sin obtener un triunfo. El último lo consiguió en Andratx el 10 de febrero y, desde entonces, cinco empates y una derrota, la que lo dinamitó todo la mañana que la Penya Indepent se llevó los tres puntos del Rico Pérez marcando tres goles a domicilio, algo que solo ha hecho una vez en la presente campaña, en la que tiene muchas papeletas para acompañar a Manresa y La Nucía a Tercera RFEF.

Los blanquiazules fueron incapaces de marcarle al colista que una semana después, en el mismo escenario, recibió seis tantos del Mestalla, uno de ellos obra de César Moreno, de nuevo con un cabezazo por anticipación al primer palo. Dos goles suma ya el centrocampista al que el técnico no supo cómo sacarle provecho.

Regreso al peor pasado

La media docena de fechas sin ganar suponen devolver al proyecto a su peor curso fuera del fútbol profesional, el que se suspendió por la pandemia y evitó un descenso cantado de los alicantinos a Tercera División.

En esa campaña 2019-20, una con cinco entrenadores a pesar de que no se completó el ejercicio, se quedó sin ganar en las seis primeras jornadas de Liga. Aquello le costó el puesto a Lluís Planagumà tras acariciar el ascenso a Segunda solo unos meses antes. Aquella mala dinámica comenzó con un empate ante el Prat (1-1) y se prolongó con derrotas ante Villarreal B (1-2), Levante Atlético (1-0), Sabadell (0-2), Orihuela (1-3) y Llagostera (2-1).

Y siendo este un récord muy desfavorable, no fue el peor ciclo de partidos que firmó ese Hércules aquel curso. No mucho tiempo después estuvo sin sumar tres puntos de una tacada en siete partidos, desde la jornada 11 a la 17, un periplo lacerante que también provocó la destitución del sustituto de Planagumà, Jesús Muñoz.

Ahora, el Hércules, al que el título de campeón de invierno le queda lejísimos, ha sido incapaz de ganar consecutivamente a Penya Independent (2-3), Cerdanyola (1-1), Europa (0-0), Mestalla (0-0), La Nucía (0-0) y Terrassa (1-1) en la que ya es la peor racha sin victorias del equipo en sus tres temporadas en Segunda RFEF.

Los cinco empates seguidos componen, además, un tope del Hércules en esta categoría, ya que nunca antes había igualado tantos partidos de forma consecutiva.

Esto ya ha pasado antes

La desintegración es tan sorprendente que hasta los proyectos de Sergio Mora y Lolo Escobar estaban mejor que el Hércules de Torrecilla a estas alturas de la temporada. El exayudante de José Bordalás, en su primera aventura como primer entrenador, llevaba 48 puntos, y el del ahora técnico del Algeciras sumaba 49, dos más de los que ha cosechado hasta ahora el preparador extremeño.

El paralelismo que está experimentando este vestuario con el de Mora es inquietante porque aquel equipo estuvo a punto de quedarse fuera del «play-off» en la penúltima jornada de Liga. Un gol del central Diego Jiménez en el Salto del Caballo, en Toledo, con el tiempo ya cumplido, le dio un punto vital, el que le sacó finalmente al Mar Menor, que, como ahora el Torrent, amenazaba su quinta plaza.

Once puntos en once semanas –todas las de la segunda vuelta– son muy mal augurio. Solo un gol en las últimas cuatro jornadas, dos en las cinco recientes. Con ese coeficiente realizador resulta muy difícil superar a enemigos. A cualquiera, a los de arriba (por descontado) y a los de abajo, como quedó acreditado en La Nucía. Próximo rival: Alzira, solo dos puntos por encima del descenso.

Carlos Mangada controla el balón delante del delantero centro del Terrassa Aythami.

Carlos Mangada controla el balón delante del delantero centro del Terrassa Aythami. / Jose Navarro

Mangada se pierde el partido en Alzira tras ver la quinta amarilla

Carlos Mangada no estará en Alzira. El centrocampista alicantino vio la quinta amarilla de la temporada frente al Terrassa. El colegiado gaditano Francisco Sáez Vital le amonestó en el tiempo de prolongación por, según el acta, «realizar observaciones técnicas» a una de sus decisiones.

Esa tarjeta postrera que tiene una defensa legal imposible ante el Comité de Competición, le impedirá desplazarse con el equipo al Luis Suñer Picó este sábado y devolverá, casi con total probabilidad, la titularidad a Miguel Marí, que el pasado domingo no disputó ni un minuto.

Siguen apercibidos (con cuatro cartulinas) Ryan Nolan, Alfonso Candelas y Samu Vázquez; mientras que Colomina llega a las 3 después de haber cumplido ya un ciclo de amonestaciones. Mendes y De la Nava también suman tres.