El mamógrafo de segunda mano del Hospital de San Vicente, otra vez averiado

El Hospital de San Vicente del Raspeig no tiene suerte con los mamógrafos. Hace más de dos años, a finales de 2021, se rompió el único que había en el centro médico y estuvo casi siete meses sin funcionar. Ahora, una nueva avería ha dejado sin servicio un equipo que da cobertura a miles de personas.

El PSOE de San Vicente ha presentado una moción al pleno que se celebra este miércoles para que el hospital vuelva a disponer de un mamógrafo y acusa al gobierno del PP en el Ayuntamiento y a la Generalitat de "dejar perder este servicio tras su negativa a reparar esta herramienta". La propuesta que llevan los socialistas aborda la falta del aparato y la promoción de tratamientos preventivos en la lucha contra el cáncer de mama y otras enfermedades.

La concejala socialista Yolanda García ha explicado que el PSOE presenta esta moción con el "objetivo final" de que San Vicente vuelva a contar con este servicio "esencial" que daba cobertura a miles de pacientes.

Además, quiere evidenciar el "cambio de discurso" del alcalde, Pachi Pascual, y sus concejales cuando estaban en la oposición, durante su etapa en Ciudadanos (Cs), y ahora. "Después de que se haya roto, el PP se niega a arreglarlo, lo que supone un agravio y una privación de un servicio sanitario público a miles de pacientes, que se ven obligadas a trasladarse a Alicante para someterse a estas pruebas", lamenta.

El servicio de mamografía del Hospital de San Vicente atiende al año a unas 8.500 mujeres para el cribado frente al cáncer de mama

En la misma línea, destaca García que cuando Pascual y la concejala de Servicios Sociales, Mariela Torregrosa, estaban en Cs, "pedían el arreglo inmediato" del mamógrafo por parte del Botànic y "mostraron su aprobación cuando se arregló en la anterior legislatura porque era un servicio muy necesario".

En cambio, ahora, estando en el PP y gobernando, afirman "que no es necesario arreglarlo porque a las pacientes no les importa desplazarse unos pocos kilómetros a Alicante" para realizarse pruebas”, agrega la edil.

Por ello, el PSOE pide que el PP haga lo que hicieron los socialistas: arreglar la herramienta y dotar de un mamógrafo a las miles de pacientes del Hospital de San Vicente. Y es que la propuesta socialista recoge distintos acuerdos, entre ellos que el Ayuntamiento se comprometa a realizar todas las gestiones necesarias para que la Generalitat adquiera y ponga en funcionamiento el aparato en el menor tiempo posible, garantizando así el acceso de todas las mujeres del municipio a este servicio de salud crucial.

Asimismo, pide que el Consistorio asuma, además, campañas de sensibilización y promoción de tratamientos preventivos, como la mamografía y otros chequeos médicos periódicos, dirigidos a todas las mujeres del municipio, con el objetivo de fomentar la detección temprana de enfermedades y reducir la morbimortalidad asociada.

“No se puede tolerar que Pascual y sus concejales pidieran el arreglo inmediato de esta herramienta cuando estaban en la oposición, y ahora, por no presionar a su jefe, Carlos Mazón, estén callados y cambien de discurso justificando que San Vicente haya dejado de contar con este servicio porque a las pacientes no les importa desplazarse a Alicante para las pruebas médicas”, zanja Yolanda García.

La concejal de Sanidad, Mercedes Torregrosa, ha explicado que se trata de un aparato de segunda mano y la Conselleria de Sanidad le ha trasladado que valora dos opciones: arreglarlo o enviar otro. El problema es si el coste que implica la reparación merece la pena realizar la inversión.

Torregrosa ha señalado que los pacientes de San Vicente son derivados a Alicante al Hospital Doctor Balmis, "que está a ocho kilómetros" y al centro de especialidades de Campoamor, que va a acometer una renovación integral, incluido de mamógrafos. Para la edil, la moción del PSOE no es más que "demagogia".

Este diario se ha puesto en contacto con la Conselleria de Sanidad para conocer si contempla arreglar el mamógrafo, pero no ha recibido respuesta.

El servicio de mamografía del Hospital de San Vicente atiende al año a unas 8.500 mujeres para el cribado frente al cáncer de mama. 

El aparato, que permaneció sin uso durante un año, hasta que en diciembre de 2019 entró en funcionamiento, se averió a finales de 2021, lo que obligó a desviar a las pacientes a Alicante durante siete meses, aunque no provocó retrasos en las pruebas.

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