El Gobierno remodela el peligroso enlace de la A-70 y la A-31 en Alicante tras más de 30 años de continuos accidentes

El Gobierno va a remodelar el peligroso enlace de la circunvalación de Alicante, la A-70, con la autovía que sale de la capital de la provincia hacia Albacete y Madrid, la A-31, después de más de 30 años con una siniestralidad casi constante en este punto. El Ministerio de Transportes ha anunciado recientemente la aprobación del proyecto para reformar este nudo viario, situado a la altura de Mercalicante, en el acceso oeste a la ciudad, y que soporta un tráfico muy elevado, a menudo cercano a la saturación. La reforma prevista es de gran envergadura, de ahí el elevado montante de la inversión, cercano a los 22 millones de euros.

El actual enlace se encuentra en servicio desde la apertura de este tramo de la A-70, en enero de 1990, pocos meses después de que lo hiciera la A-31 entre Almansa y este mismo punto. La única reforma que se le ha hecho hasta ahora se llevó a cabo en 1995, cuando se culminó la llegada de la autovía desde Madrid y Albacete al centro urbano de Alicante y al puerto, aunque fue solo parcial para facilitar algunas conexiones que se habían quedado pendientes. En esencia, el nudo de las dos autovías sigue siendo propio de las autovías llamadas "de primera generación", con accesos y salidas cuyos carriles asemejan la forma de un trébol.

Esto implica curvas muy cerradas en las entradas y salidas, así como que algunos carriles tengan muy poca longitud, lo que da pie a numerosos accidentes, la mayoría por alcance, sobre todo en la incorporación de la A-31 a la A-70 o al querer salir de esta en dirección al puerto de Alicante. Los vehículos suelen circular por la A-70 a una velocidad bastante alta, quizá demasiado para el casi siempre denso tráfico que hay en este lugar, y no hay ningún tipo de limitación, ni siquiera como recomendación. Tan solo algunas señales de peligro advierten del riesgo de congestión.

Según los datos más recientes disponibles del Ministerio, de 2021, por este tramo de la A-70 circulan 82.738 vehículos diarios, mientras que por la A-31 lo hacen 42.644. Se trata, por lo tanto, de vías muy congestionadas, especialmente la primera, la más saturada de toda la provincia, algo que junto con las deficiencias en el mencionado enlace acrecienta la inseguridad vial. Y, por lo tanto, hace más perentoria la obra prevista.

La estadística de accidentes en la Red de Carreteras del Estado, también publicada por el Ministerio de Transportes, revela que entre 2017 y 2021 se han producido en este punto de la A-70 un total de 30 accidentes con víctimas, con el resultado de un fallecido, un herido grave y 55 lesionados de carácter más leve. En la calzada de la A-31 la siniestralidad es bastante menor, pero no deja de ser significativa, con 10 percances con víctimas en el mismo periodo de cinco años, que han dejado dos heridos graves y 16 leves.

Reordenación de accesos

El trazado aprobado por el Ministerio se someterá próximamente a información pública para abrir la posibilidad de alegaciones, pero la memoria del proyecto puede consultarse ya. Según se refleja en ella, los vehículos que procedan de Alicante por la A-31 y quieran seguir por la A-70 en dirección Elche y Murcia ya no tendrán que hacer el cerrado giro de 270 grados para incorporarse a esta última, y luego tener que hacer la peligrosísima maniobra de salir de ese carril. Se construirá una nueva calzada que facilitará este acceso de manera directa. Esto beneficiará a quienes vengan por la A-70 desde la zona de la Universidad y quieran tomar la A-31 hacia Alicante, que no se encontrarán con vehículos que de repente salgan hacia ese carril.

Asimismo, la carretera hacia El Bacarot, la CV-8482, dejará de tener un acceso directo desde la A-31 en sentido sur. Los vehículos que quieran tomar esa dirección, o bien dirigirse hacia Mercalicante, deberán abandonar la autovía en la salida inmediatamente anterior, la del polígono Pla de la Vallonga, y seguir luego por una vía de servicio y una rotonda, ambas de nueva construcción. En cambio, se facilitará el acceso a Mercalicante desde la A-70 viniendo de Elche con una calzada de incorporación directa a la N-330, en lugar de tener que tomar durante unos metros la A-31 en sentido Madrid para luego abandonarla de inmediato.

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Saliendo de Alicante por la N-330 ya no será posible tomar directamente la A-70 en sentido Murcia como hasta ahora, sino que habrá que hacerlo a través de la nueva rotonda de la carretera de El Bacarot. Esto supondrá un pequeño incordio para quienes ahora utilizan este acceso, pero hay que decir que eso evitará la peligrosa incorporación en la A-70 que hay ahora, lo cual redundará en la mejora de la seguridad vial. También se renovará la conexión de la A-70 hacia la A-31 viniendo desde Elche, con un carril más largo y con un trazado más suave que el actual.