Pioneras en Alicante: 100 mujeres para no olvidar (nacidas entre 1846 y 1899)

La periodista Elvira Rodríguez y la historiadora Caridad Valdés han elaborado una lista de féminas que a través de diferentes sectores y en diferentes momentos han ido dejando huella, marcando el siglo, rompiendo barreras y abriendo camino a las futuras generaciones

Mujeres con redes de pesca en 1944.

Mujeres con redes de pesca en 1944. / Foto Sánchez. AMA

Durante buena parte del siglo XX las mujeres quedaron marginadas de la vida pública y profesional asignándoseles un papel de madres y esposas. Fuera del hogar muy pocos trabajos de responsabilidad le fueron atribuidos.

Entre los primeros y más corrientes podemos señalar dos que estaban asociados a atención-cuidado-servicio y a la enseñanza, como son comadrona y maestra. Las carreras universitarias se convirtieron en todo un desafío, pues hasta 1910 les estuvo prohibido asistir a las aulas de las universidades públicas, necesitando la obtención de una serie de permisos especiales (paterno, de los profesores, ministerio, etc). De ahí su presencia mínima en la primera mitad del XX. La vida religiosa con sus diferentes carismas fue otra opción.

También entre las mujeres abundaba la práctica de las artes (pintura, música) y de la literatura, sobre todo la poesía, si bien, en los comienzos del siglo, estas habilidades eran propias de la formación cultural de una determinada clase social, generalmente acomodada, sin pretender ir más allá del entorno familiar o local. Las mujeres de la alta burguesía ejercieron muchas veces un papel de protectoras del lugar, ayudando a los sectores más desfavorecidos, otras lo hicieron como empresarias logrando grandes éxitos. En todas estas profesiones encontramos ejemplos dignos de mención.

A mediados del siglo, la situación va cambiando y la mujer comienza a abarcar algunos campos hasta entonces asignados a los hombres. Pero fue en el último tercio cuando su presencia en la vida pública aumenta exponencialmente, incorporándose a numerosas profesiones, puestos y cargos de máximo nivel.

He aquí una pequeña muestra de mujeres, ordenadas por año de nacimiento, que a través de diferentes sectores y en diferentes momentos han ido dejando huella en la historia de la provincia, marcando el siglo, rompiendo barreras y abriendo camino a las futuras generaciones.

Antonia Navarro Mira “La Pichocha” (Novelda, 1846–1921)

Antonia Navarro Mira 'La Pichocha'

Antonia Navarro Mira 'La Pichocha' / Imagen facilitada por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

Pertenecía a la burguesía local. Su padre, del que proviene el apodo, era comerciante y exportador de azafrán. Incrementó el patrimonio heredado considerablemente. Dueña de su destino en un mundo de hombres, se convirtió en la matriarca de la familia. Amante del arte y de las corrientes modernistas del momento, construyó la casa que sería su vivienda, y que hoy es la Casa-Museo Modernista de Novelda.  

Matilde Pérez Mollá (Quatretondeta, 1858–1936)

Matilde Pérez Mollá y, a la derecha, la calle que lleva su nombre

Matilde Pérez Mollá y, a la derecha, la calle que lleva su nombre / Imágenes facilitadas por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

Se convirtió en la primera alcaldesa de España cuando en 1924 el gobernador civil le designó al frente del municipio de su población natal. Pertenecía a una familia acomodada con indudable cultura y formación. Durante los seis años que duro su mandato se llevaron a cabo importantes reformas, ya que se dotó al pueblo de luz eléctrica y se realizó la primera carretera. 

Josefina Oliver Molina “Madre Elisea” (Benidoleig, 1869–1931)

Madre Elisea

Madre Elisea / Imagen facilitada por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

Fundadora en 1888, junto con 8 religiosas, de la Congregación de las Hermanas Carmelitas de la Virgen María del Monte Carmelo (Carmelitas de Orihuela). Superiora general durante casi todo el periodo 1899-1931. Establecieron muchos colegios en la provincia, aminorando las altas cuotas del analfabetismo femenino. Todavía hoy conservan cinco colegios en la provincia y uno en Murcia, y obras en todo el mundo. Fue declarada Venerable, primer paso para la beatificación.

Hermana Arcángela Badosa Cuatrecases (Gerona, 1878–Elda, 1918)

Hermana Arcángela Badosa Cuatrecasas

Hermana Arcángela Badosa Cuatrecases / Imagen facilitada por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

Ingresó en las Hermanas Carmelitas de la Virgen del Monte Carmelo en 1907 y fue destinada al Colegio de Elda y posteriormente al Hospital Municipal, donde se encargó de los enfermos tuberculosos, enfermedad que le llevó a su muerte. Las fábricas de esta población cerraron para que todos pudieran asistir al sepelio. Por su entrega y vida ejemplar ha sido declarada Venerable, iniciándose así el proceso de su beatificación. 

Virginia Soler Alberola (Alcoy, 1883–1965)

Virginia Soler Alberola

Virginia Soler Alberola / Imágenes facilitadas por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

De familia trabajadora, estudió medicina en Barcelona, licenciándose en 1908 con expediente brillante. Se inscribió en el Colegio de médicos de Alicante con el número 92 siendo la primera mujer facultativa del colectivo. Enamorada de su profesión enseguida abrió su clínica en Alcoy, donde su labor y su persona fueron muy apreciadas. 

Ramona García Brotons (Petrer, 1886–1970)

Ramona García Brotons

Ramona García Brotons / E. ÁVILA. Imagen facilitada por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

Pasó a la historia por ser la primera mujer abanderada en las Fiestas de Moros y Cristianos de la provincia. Sucedió en Petrer en 1905, en su comparsa de moros. En estos festejos, la mujer ha tenido un papel secundario y restringido hasta el último tercio del siglo XX. En Xixona y Mutxamel no hubo abanderadas hasta 1972, en otros municipios la incorporación se hará más tarde y a veces por sentencia judicial. 

María Ibars Ibars (Valencia, 1892–1965)

María Ibars Ibars

María Ibars Ibars / Archivo Dénia. Imagen facilitada por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

En Dénia pasa su infancia y juventud, que marcará su obra, escrita “a l’ombra del Montgó” y junto al mar. Como maestra, contribuye a la renovación pedagógica. Destaca como poeta, novelista y narradora en valenciano, aunque por la dificultad de los tiempos también escribió en castellano. La Academia Valenciana de la Lengua decreta 2024 como “l'Any Maria Ibars”, con actividades culturales en su nombre. Nombrada Hija Adoptiva de Dénia, también da nombre a un IES.

Hermana Teresa Mira García (del Niño Jesús de Praga) (Algueña, 1895– Novelda, 1941)

Hermana Teresa Mira García

Hermana Teresa Mira García / Imagen facilitada por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

Ingresa en la Congregación de las Carmelitas Misioneras Teresianas en 1915. Desde 1936 residió en Novelda, donde se entrega con generosidad y alegría a los más débiles: niños, enfermos y necesitados. El Papa San Juan Pablo II la declaró Venerable en 1996, iniciándose con ello el primer paso para la beatificación. 

Manolita Luque Albalá (Madrid, 1898–Guadalajara, México, 1982)

Manolita Luque Albalá

Manolita Luque Albalá / Imagen facilitada por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

Era maestra de primera enseñanza y la mujer con más presencia en la vida política republicana de Alicante, asumiendo su filosofía e ideales. Intervino en muchos actos organizados en la provincia y escribió también textos para la prensa. Pertenecía a la Unión Republicana Feminista de Alicante, creada en 1931, de la que fue presidenta y militaba en el partido de Izquierda Republicana. Se marchó al exilio en 1939.

Josefina Pascual Devesa (Madrid, 1899–ca. -fecha aproximada-1975)

Josefina Pascual Devesa

Josefina Pascual Devesa / Imagen facilitada por Elvira Rodríguez y Caridad Valdés

Fue la novena mujer de España en licenciarse en Farmacia, acabando su carrera con el doctorado en el Instituto Pasteur. En Alicante ayudó en la farmacia de su padre, establecida en la que hoy es Plaza de Calvo Sotelo, montando posteriormente su laboratorio de análisis clínicos y su farmacia en Benissa. La Universidad de Alicante ha creado un premio para tesis doctorales relativas a perspectivas de género que lleva su nombre.