VIGILANCIA POR TIERRA Y AIRE

Fiestas blindadas en Elche frente a peleas y droga

Más de 200 policías nacionales y locales velan por la seguridad estos días en los festejos ilicitanos, incluso con drones y un helicóptero

Las barracas y el Parque Municipal, puntos calientes donde se concentran los delitos, incluso la presencia, por primera vez, de la cocaína rosa

Un perro de la Policía Nacional busca explosivos en Santa María, y agentes locales con unos jóvenes. | ANTONIO AMORÓS

Un perro de la Policía Nacional busca explosivos en Santa María, y agentes locales con unos jóvenes. | ANTONIO AMORÓS / Antonio Amorós

Rubén Míguez

Rubén Míguez

«Están siendo unas fiestas tranquilas». Es en lo que coinciden los dos cuerpos que velan por la seguridad de las Fiestas de Agosto en Elche. No obstante, están llevando a cabo destacadas intervenciones, principalmente por incautación de drogas, de armas blancas y por peleas que se producen entre jóvenes, sobre todo, a altas horas de la madrugada cuando el abusivo consumo de alcohol en sus cuerpos hace mella.

Más de 200 policías nacionales y locales se despliegan cada día en la ciudad, sobre todo por la tarde y noche, cuando hay mayor concentración de eventos y de gente en la calle, para que sean unos festejos tranquilos y para prevenir y actuar en caso de incidente.

Los puntos más calientes están en el parking de la Universidad Miguel Hernández (UMH), donde está instalada la barraca municipal en la que se celebran conciertos, y el Paseo de la Estación con el racó de ocio y, ahora, el gastronómico. Son los puntos donde mayor concentración de personas hay. Los controles son habituales, y también los cacheos para evitar las drogas y las armas blancas.

Las actas por consumo de alcohol en la calle y drogas son las más habituales, y también controlar las aglomeraciones, como en las barracas, incluso con drones.  | ANTONIO AMORÓS

Unos agentes de la Policía Local de Elche desplegados en el Paseo de la Estación. / Antonio Amorós

La orden del Ayuntamiento de Elche para cerrar el Parque Jaume I y los huertos anexos para frenar el consumo de alcohol de jóvenes y de menores, el botellón, está propiciando que se hayan rebajado, sustancialmente, las infracciones por consumo de alcohol en la calle. Sin embargo, no sucede lo mismo con las actas por consumo o tenencia de drogas, que son cuantiosas.

Las sustancias estupefacientes que tanto los perros de la Policía Local como los cacheos de la Policía Nacional están detectando estos días son, principalmente, marihuana, en diferentes formas, y cocaína.

También se ha detectado, por primera vez en Elche, la venta de la llamada cocaína «pija», la rosa o «tusi», un producto psicoactivo, una droga sintética en realidad, que se consume de forma esnifada, y que es muy demandada en círculos de jóvenes adinerados, puesto que el gramo cuesta prácticamente el doble que el de la cocaína. También se han incautado los agentes de MDMA, también conocida como éxtasis o Molly, una droga química sintética que actúa como estimulante y psicotrópico.

Menos sanciones por orinar en la calle

La Policía Local llegó a imponer, el primer día de fiestas, hasta 200 sanciones por consumo de alcohol en la calle, una cifra que fue bajando hasta las poco más de 40 a mediados de esta semana. «Estamos notando que tenemos menos infracciones por botellón y también, como consecuencia de ello, hemos tenido que poner menos infracciones por orinar en la calle, hay menos botellones y menos gente meando en la vía pública», explica José Eugenio Medina, intendente de la Policía Local de Elche.

El cuerpo de seguridad municipal despliega cada noche entre 50 y 200 agentes, estos últimos los que patrullarán en días como la Roà y la Nit de l’Albà, lo que supondrá, prácticamente, la mitad de la plantilla.

Un perro policía de la Unidad de Guías Caninos de la Policía Nacional en la Basílica de Santa María.

Un perro policía de la Unidad de Guías Caninos de la Policía Nacional en la Basílica de Santa María. / Antonio Amorós

En el operativo de seguridad de fiestas los equipos locales que están actuando son los de Operativos de Seguridad (EOS), el Grupo de Apoyo a Operaciones (GAO), que buscan armas y drogas, la Unidad de Medios Aéreos (UMAE), con hasta tres drones funcionando, la Unidad Canina (UCAN K9) y el equipo motorista LOBOS de la Brigada Nocturna de Seguridad, así como la unidad de Aperturas y Establecimientos para controlar horarios y hacer inspecciones, y la Policía Judicial de Tráfico para controles de bebidas y sustancias estupefacientes.

En el caso de la Policía Nacional, en los días fuertes patrullan más de 35 agentes. Además de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), se han desplegado los Grupos Operativos de Respuesta (GOR). Además, el operativo lo completan los Tedax, especialista en desactivación de artefactos explosivos , la Unidad de Intervención Policial (UIP), los antidisturbios que llegan de València, la unidad de Caballería, la aérea, con un helicóptero, la de drones, y agentes de apoyo llegados de Benidorm y de Alicante.

«En lo que más se está actuando es en la intervención de armas blancas y actas de tenencia de drogas, con controles e identificaciones selectivas en las entradas a las barracas», señala el Inspector Jefe de la Brigada de Información de la Policía Nacional de Elche, Paco Fernández.

Fiestas blindadas frente a peleas y droga

Un Policía Nacional busca artefactos con su perro en una papelera. / Antonio Amorós

Explosivos

Acompañamos a un equipo de guías caninos de la Policía Nacional, desplazados a Elche, que serán los que se encarguen de buscar explosivos en la Basílica de Santa María y su entorno antes de las celebraciones del Misteri, y en la Nit de l’Albà. El can, entrenado para sentarse en el caso de que detecte algo sospechoso, acompañado por un agente, olfatea cada rincón del templo y, en el exterior, se centra en las papeleras.

Afortunadamente, es negativa esta requisa y el perro consigue su premio tras realizar un excelente trabajo en el que no se distrae ni con la presencia de otros canes.

Las unidades caninas van acompañadas de los Tedax, que han adelantado su presencia en Elche tras el incidente con un cohete que ha dejado heridos a tres niños.

Fiestas blindadas frente a peleas y droga

Aglomeración de personas hay en las barracas y los racós. / Antonio Amorós

Perros policía también ayudan a los agentes locales a detectar droga. Cada noche se hacen presentes en la barraca municipal. Es en este espacio donde se despliega un amplio dispositivo que controla, también, que no se supere el aforo de 8.000 personas.

Este año se ha implementado un acceso mejor que permite un mayor control a los agentes accediendo por el carril norte de la avenida, mientras que la salida se hace por la rotonda del instituto. «Estamos preparados para una posible evacuación y desalojo, como sucedió el año pasado por el viento», indica José Eugenio Medina.

Los agentes colaboran con el servicio de seguridad de la barraca, para intervenir en el caso de una pelea o agresión, como ha sucedido. Mientras que en el Paseo de la Estación la Policía Local hace requisas en busca de armas blancas, como navajas.

Drones

Un punto conflictivo es el Parque Municipal. Un dron sobrevuela este enorme espacio verde con una cámara térmica para detectar concentraciones de jóvenes. Cuando se ve un grupo numeroso, los agentes acuden para ver si está de botellón.

Sin embargo, lo que se está detectando en esa zona es consumo de estupefacientes. En la misma noche detienen a tres personas allí por tráfico de drogas.

El dispositivo está siendo un éxito. «Como tenemos tantos agentes desplegados estamos consiguiendo actuar rápidamente evitando males mayores en el caso de agresiones o peleas», asegura el intendente de la Policía Local de Elche. Otro dispositivo se despliega en la zona centro, y uno específico para los actos propios de las fiestas de Elche.

Fiestas blindadas frente a peleas y droga

Unos agentes identifican a un joven en un parque. / Antonio Amorós

Entre los dos cuerpos policiales, cada noche de estas fiestas, de media, se están detectando unas 200 infracciones, la mayoría por consumo o tenencia de sustancias estupefacientes, y por beber en la calle. La Policía Nacional, además, está desplegando un helicóptero para controlar las concentraciones masivas de personas durante la mascletà. También sus drones vigilan que no haya incidentes en actos como la charanga.

Además de policías uniformados, la Comisaría de Elche ha desplegado a otros agentes de paisano que vigilan también que no se cometan hurtos y robos cuando hay aglomeraciones. Nunca se sabe si un policía puede estar vigilando al lado. Es su eficacia. «Además, hacemos controles e identificaciones selectivas en las entradas a las barracas y racós, para evitar que alguien meta droga o entre con un arma blanca», explica el Inspector Jefe de la Brigada de Información de la Policía Nacional de Elche, Paco Fernández.

En estos días también han corrido bulos por las redes sociales sobre presuntos apuñalamientos en las barracas, incluso con algún fallecido, y citas entre bandas para pelearse. Algo que la Policía ha desmentido y pide que no se propaguen estas «fake news» que solo hacen asustar pese a la «tranquilidad» que, aseguran fuentes policiales, es la nota predominante en estas fiestas. Una gran presencia policial que busca que todos podamos disfrutar de unos días grandes sin sobresaltos.