Multan a decenas de conductores por ir a más de 50 kilómetros/hora en el Pont del Bimil·lenari de Elche

Un control aleatorio de la Policía Local, con un coche radar camuflado, el pasado 5 de febrero, acabó con decenas de multas, algunas fuentes aseguran que casi un centenar, en muy pocos minutos en las inmediaciones del Pont del Bimil·lenari de Elche en un punto en el que la velocidad se había reducido de 50 kilómetros por hora a 30 kilómetros por hora sin que nadie sepa los motivos de esta decisión de limitación. Los únicos radares fijos de Elche, y que no multan, están en la calle Ángel y Joan Carles I.

El tema ha generado una alarma social en las redes sociales y hay motivo para ello porque la sanción mínima que llegará a los hogares vía Suma es de 300 euros y la retirada de dos puntos en el carné de conducir, pero es que hay conductores a los que les espera una multa de 500 euros y seis puntos por el rango de exceso de velocidad que se les aplica. Si es más de 50 kilómetros supone un delito y hubo un caso. El radar, según un portavoz de la Policía Local, se puso a 51 kilómetros/hora (es decir, a 21 kilómetros más de lo permitido) y pilló a muchos conductores desprevenidos, habituales de esta calzada que suben y bajan al polígono industrial de Carrús, van al tanatorio, a alguna de las tiendas y al centro comercial o bien simplemente a coger la autovía o continuar por la ronda.

Tramo

Es cierto que se había reforzado la señalización, tanto horizontal como la vertical, indicando que la velocidad era a partir de ahora de 30 kilómetros por hora, pero nadie o muy pocos la cumplieron, quizá por el hecho de que el tramo coincide con la propia ronda, que no deja de ser por su propia esencia una vía rápida, que viene desde Alicante, donde la velocidad oscila entre los 80-90 kilómetros por hora en el tramo interurbano, que baja (o bajaba) a los 50 kilómetros por hora en el que coincide con el casco urbano de Elche. Que estuviera a 50 kilómetros por hora no es baladí porque es la velocidad habitual en las vías urbanas de doble carril en un sentido, aunque el Ayuntamiento de Elche tiene potestad para reducirla por debajo de la misma por una causa justificada. ¿La hubo? Eso se pregunta todo el mundo ahora, pero nadie tiene una respuesta. Ni el propio concejal Claudio Guilabert, quien aseguró que desconoce los motivos por los cuales se tomó la decisión, asunto por el que ya está interesándose.

El tramo que supuestamente es conflictivo, donde se aplica la reducción, coincide prácticamente con el propio puente, aunque las indicaciones de 30 kilómetros/hora comienzan un poco antes de las rotondas de acceso al viaducto desde ambos sentidos, la de Cáritas y la del Camino del Pantano. Realmente, lo que pretende esa señalización municipal es reducir la velocidad sobre el propio Pont del Bimil·lenari donde recientemente se ha instalado un balizamiento inteligente que a día de hoy aún no ha comenzado a funcionar.

Biondas

A preguntas del diario, el concejal aseguró que lo hará en breve cuando la empresa instaladora mantenga una reunión con los técnicos y la Policía Local para explicar las características de funcionamiento. Dicho balizamiento, y quizá ahí puede estar la explicación, ha cambiado el diseño de las biondas interiores del viaducto, las que separan los carriles de circulación de las aceras.  Las nuevas por su diseño han permitido ganar medio metro en los carriles de circulación. Con ello puede dar sensación de seguridad a los conductores y que aprieten el acelerador sin ser conscientes. El que ahora existan carriles más anchos quizá es lo que se ha compensado con la reducción de la velocidad.

A paso de tortuga

Además del debate que ha generado en redes sociales este asunto ha tenido otras dos consecuencias. Por un lado, que obligue a la Policía Local que ha procedido a la instalación de un radar fijo en el Pont del Bimil·lenari, según explicó un portavoz al ser preguntado por este diario. La otra es que ahora los coches sobre el puente van a paso de tortuga. No es una forma de hablar, es algo literal y muy llamativo que cualquiera que circule por ahí lo va a ver. Ese es el efecto que ha tenido.

Los responsables municipales están sorprendidos por el resultado que ha supuesto la reducción a 30 kilómetros por hora sobre el puente. Un portavoz policial y el propio concejal de Movilidad aseguraron al diario que van a estudiar este caso y qué ha ocurrido. No sé descarta el devolver a 50 kilómetros por hora la velocidad en la vía, aunque igual se valora el mantenerla en los actuales 30 kilómetros por hora, pero nadie ha sabido explicar por qué de esta reducción o quién lo decidió. Otra cuestión y muy dolorosa es lo que ahora le toca pagar a todos estos conductores que han sido "cazados" porque son multas que llevan aparejadas la retirada de puntos del carné, lo que aquí también le recordamos:

• De 21 a 30 km/h más: multa 300 euros 2 puntos.
• De 31 a 40 km/h más: multa 400 euros 4 puntos.
• De 41 a 50 km/h más: multa 500 euros 6 puntos.

• A más de 105 kilómetros por horaEl radar sí cazó a un vehículo que realmente iba rápido porque circulaba a más de 105 kilómetros por hora; es decir, triplicaba de largo la velocidad en la vía. Este asunto acabará en el juzgado porque se trata de un delito contra la seguridad. Lleva aparejado penas de prisión y la retirada del permiso de conducir durante un muy largo periodo. La DGT recomienda respetar siempre los límites.

A más de 105 kilómetros por hora