San Bonifacio bendice a Petrer

Los festeros no han podido darle al patrón las tres tradicionales vueltas a la plaça de Baix por las excavaciones arqueológicas

Pérez Gil

Pérez Gil

San Bonifacio, Mártir, el patrón de Petrer, vuelve a presidir desde hoy el altar mayor de la iglesia de San Bartolomé bendiciendo a su pueblo hasta que regrese a la ermita, el próximo lunes, tras el Alardo de Subida del Santo.

La Bajada del Santo por las calles del casco histórico de Petrer.

La Bajada del Santo por las calles del casco histórico de Petrer. / Áxel Álvarez

Una multitudinaria procesión de Bajada ha recorrido unas calles del casco histórico con más vida que nunca. Desde la ermita hasta la plaça de Baix a través del Carrer Nou, San Vicente, José Luis Perseguer, Cánovas del Castillo y Miguel Amat con la comparsa de Labradores arropando este año la venerada imagen.

Los festeros saludando al patrón de Petrer antes de salir de su ermita.

Los festeros saludando al patrón de Petrer antes de salir de su ermita. / Áxel Álvarez

El fuego del Alardo y la ostentación de las Rodelas de las diez comparsas ha precedido, a partir de las diez de la mañana, el anhelado reencuentro de Petrer con su patrón. Y en homenaje póstumo del vicepresidente José María Bernabéu también se han disparado salvas en su recuerdo.

El fuego, la pólvora y la delicada danza de las niñas sellaban la tradición mientras se lucían los cargos festeros de Labradores, Vizcaínos, Marinos, Tercio de Flandes, Estudiantes, Moros Fronterizos, Moros Nuevos, Moros Beduinos, Moros Viejos y Berberiscos.

Y de nuevo la emoción ha embargado a los festeros cuando la imagen ha llegado primero a la plaza del Derrocat y, posteriormente, ha enfilado entre aplausos y vítores el último tramo por la emblemática plaça de Baix, donde se ha interpretado el Himno Nacional y realizado la tradicional suelta de palomas y el disparo de cohetes en su honor. Una vibrante escena con los festeros alzando sus gorros al cielo.

Los cañones rugiendo durante el Alardo.

Los cañones rugiendo durante el Alardo. / Áxel Álvarez

Pero en esta ocasión el santo no ha dado las tres vueltas habituales a la plaça de Baix ni tampoco lo han hecho las comparsas, que han seguido por la calle La Iglesia hasta la plaza Ramón y Cajal mientras los cargos festeros finalizaban el festejo en la Casa del Fester. Las excavaciones arqueológicas en la plaça de Baix han obligado a la Unión de Festejos a modificar el último tramo de la Bajada del Santo pero el año próximo la tradición se recuperará.

Salvas por San Bonifacio, Mártir.

Salvas de honor de rodillas por San Bonifacio, Mártir. / Áxel Álvarez

Con el cielo despejado, ausencia de incidentes y un gran ambiente ha finalizado la Bajada del Santo minutos antes de las tres de la tarde.

Y cuando los festeros estaban reponiendo fuerzas en sus cuartelillos y sedes el cielo se ha oscurecido, los truenos se han dejado sentir y una fuerte tromba de agua se ha desplomado sobre el Medio Vinalopó durante algo menos de una hora.

El patrón en la escalinata de la iglesia bendiciendo a Petrer.

El patrón en la escalinata de la iglesia bendiciendo a Petrer.

Pero los Moros y Cristianos de Petrer han hecho lo que tocaba hacer: al mal tiempo, buena cara, y a las seis y media de la tarde ha comenzado la Tradicional Guerrilla en la hora programada.