El verano está a la vuelta de la esquina y el calor empieza a apretar tras las lluvias que han protagonizado el tiempo en las últimas semanas. Ahora las ganas de rutas senderistas disminuyen para dar paso al disfrute de las múltiples playas y calas que se pueden disfrutar en la provincia de Alicante.
Así que, a continuación, os mostramos cinco rincones naturales de la Marina Alta que podrás disfrutar sin bullicios ni masificaciones y que nada tienen que envidiar a calas más populares como la Granadella o el Moraig.
Cala Racó del Corb (Calp)
La Cala del Racó del Corb se ubica en la línea que divide los términos municipales de Altea y Calpe, separando las comarcas Marina Baixa y Marina Alta.
Escudadas por los acantilados del Morro de Toix, las aguas de esta cala están protegidas por ley ya que conforman parte del parque natural de la Serra Gelada. Además, la presencia de la esencial pradera de posidonia oceánica, una planta marina bajo protección y de gran importancia ambiental, la hace aún más atractiva. La llegada de estos restos, conocidos como arribazones, ayudan a mantener las aguas limpias, oxigenadas y cristalinas.
Se trata de una cala pequeña de cantos rodados con una extensión de apenas 200 metros de largo y 10 de ancho. Su acceso sólo es posible llegar a pie o por mar y, aunque no es demasiado complicado, requiere de precaución. Hay que bajar por una senda repleta de pinos con una pendiente bastante pronunciada, por lo que es recomendable llevar buen calzado. Es por esto mismo que, aunque cada vez cuenta con más afluencia, todavía se puede disfrutar de ella lejos del bullicio.
Un lugar perfecto para aquellos que realizan deportes acuáticos como el snorkel, paddle-surf o el psicobloc. Igualmente, para los amantes del senderismo existe la posibilidad de comenzar la ruta del Cañón del Mascarat.
Cómo llegar
Cala Llobella (Benissa)
Esta cala tranquila de piedra y arena conserva su aspecto más natural y salvaje debido a las pocas edificaciones que la rodean. Su acceso discreto y la escasa afluencia de usuarios favorece la práctica del nudismo por parte de aquellos que la visitan.
A ella se puede llegar con coche desde la carretera de Calpe y Moraira a través del camino del Cirer y cuenta con un recinto de estacionamiento con alrededor de 30 plazas disponibles. También es posible llegar a cala Llobella realizando el tramo de la ruta senderista 'Paseo Ecológico de Benissa'.
A lo largo de sus 100 metros de longitud y gracias a su fondo cristalino, esta cala se convierte en todo un atractivo para los que realizan deportes subacuáticos como el snorkel, buceo o kayak.
Cómo llegar
Cala Llebeig (Benitatxell, Teulada-Moraira)
Formada por la desembocadura del Barranc de la Viuda se encuentra situada entre los término de Teulada-Moraira y El Poble Nou de Benitatxell. Su acceso tan sólo es posible por mar o a pie. Si tu opción es llegar andando podrás hacerlo de dos maneras. Por un lado, puedes seguir el curso del barranco desde Teulada-Moraira o si prefieres, realizar la senda que discurre junto al acantilado en la conocida Ruta de los Acantilados. Ambas vías forman parte del sendero SL-CV 50. Sin embargo, hay que ser precavidos ante las aglomeraciones vistas años anteriores en esta ruta debido a la dificultad de varios tramos por el que hay que descender por cuerdas.
Las pequeñas casitas de antiguos pescadores que perviven y su estado salvaje hacen de esta cala todo un paraíso para disfrutar en la época estival. Y si quieres aprovechar todas las horas de luz posibles, el mejor momento para visitarla es por la mañana, ya que por su posición, el sol dejará de alumbrar sobre las 18 horas.
Cómo llegar
Cala Sardinera (Xàbia)
Situada al sur de Xàbia, esta cala se encuentra entre la cala Blanca y la cala del Portixol. Sin embargo, su acceso complicado no le permite concentrar a un número tan elevado de visitantes como sí consiguen sus vecinas.
Esta cala es mucho menos accesible que el resto de playas de Xàbia y de hecho, la mayoría de los que deciden visitarla acceden a ella por mar. Si lo haces andando, sólo podrá ser desde el camino que comienza en el Mirador de la Creu del Portixol, una pequeña ruta de tierra, escarpada y sin ningún tipo de sombra durante unos 10 o 15 minutos.
Asimismo, recuerda que esta cala Sardinera es una playa aislada, sin socorrista, sin papeleras y sin ningún tipo de servicio.
Cómo llegar
Cala El Trampolí (Dénia)
Situada en la línea costera al sur de Dénia forma parte de las calas rocosas del área de Les Rotes. Aunque no cuenta con arena a lo largo de su kilómetro de extensión, esta cala de rocas es una de las más codiciadas debido al buen acceso por la carretera del Barranc del Monyo a Les Arenetes.
Este rincón natural recibe su nombre por la particularidad de la existencia de un trampolín de madera en la misma playa. Asimismo, para los que disfrutan del baño cabe destacar que cuenta con una escalera y una rampa de acceso y salida al mar. También dispone en temporada media y alta de un puesto de vigilancia de socorrismo de la Cruz Roja.
Con un aforo de 84 personas, todos aquellos que visiten esta playa disfrutarán de la Reserva Natural de los Fondos Marinos del Cabo de San Antonio. Sin embargo, para los amantes del submarinismo existen restricciones, ya si desean practicar este deporte deberán solicitar un permiso previo a la Dirección Territorial de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua de Alicante.
