Instalan una barandilla para evitar caídas tras la reforma del paseo entre Muchavista y el río Seco

Costas inicia la colocación de una protección de 750 metros de longitud reclamada por residentes y Ayuntamiento de El Campello por el peligro de caída a la cala, debido al desnivel que había dejado la obra realizada el pasado verano para recuperar el frente litoral en La Zofra

Trabajos para la instalación de la barandilla este lunes en el paseo entre Muchavista y la desembocadura del río Seco

Trabajos para la instalación de la barandilla este lunes en el paseo entre Muchavista y la desembocadura del río Seco / J.A.RICO

El Ministerio para la Transición Ecológica inicia las obras para garantizar la seguridad del paseo marítimo realizado el pasado verano en El Campello, y que conecta la playa de Muchavista con la desembocadura del río Seco-Montnegre por el Rincón de la Zofra. El Servicio Provincial de Costas ha empezado la instalación de una barandilla de 750 metros de longitud para evitar caídas a la cala. Y es que la obra había dejado un desnivel en algunos puntos de más de un metro, sin protección alguna, por lo que representaban un peligro, sobre todo para personas mayores y niños, tal y como habían denunciado los vecinos y el Ayuntamiento.

Este lunes ya estaba una pequeña parte de la protección instalada, y se espera que para principios de julio esté terminada. La labores han empezado por la zona del Rincón de la Zofra, donde desde que acabó la recuperación del frente litoral a finales de año se mantenían unas vallas por seguridad en un pequeño tramo al principio del paseo. Unas obras además que fueron muy polémicas, ya que imposibilitaban el disfrute de la playa a los residentes en pleno verano, lo que primero obligó a Costas a dividirlas en fases, y finalmente, ante la imposibilidad de seguir sin cortar el acceso, se suspendieron en agosto ante las quejas de los vecinos.

Unos bañistas toman el solo en el nuevo paseo, donde se va a instalar la barandilla para evitar caídas

Unos bañistas toman el solo en el nuevo paseo, donde se va a instalar la barandilla para evitar caídas / J.A.RICO

Con esta actuación se busca atender la demanda de las comunidades de propietarios de la zona, que suman 600 viviendas con más de 1.500 residentes, y del Ayuntamiento. Los vecinos remitieron escritos en noviembre al Ministerio y Costas alertando de las deficiencias de la obra, entre las que figuraban la ausencia de protecciones y de accesos a la playa por también este peligroso desnivel, ya que solo hay un punto con escaleras y otro desde el que se puede acceder sin problemas por la altura de la cala. El Ministerio respondió que estudiaría la instalación de una barandilla y mejorar la accesibilidad. Y el Ayuntamiento también manifestó la necesidad de colocar una protección. Lo que se desconoce es si la actuación que se está desarrollando estos días incluye alguna mejora en el acceso a esta playa de cantos rodados de la Punta del Riu, donde en su tramo más cercano a la desembocadura, una vez acaba ya el paseo, se ubica la playa canina.

Zona por donde han empezado las labores para mejorar la seguridad

Zona por donde han empezado las labores para mejorar la seguridad / J.A.RICO

Los residentes denunciaron además que el paseo es muy deslizante, no tiene la altura necesaria para frenar el oleaje y que la regeneración realizada de la playa no se ajusta al proyecto. La respuesta a este escrito del mes de noviembre por parte de Costas fue que "una vez finalizadas las obras, se estudiará la procedencia por motivos de seguridad, de colocación de barandilla donde sea necesario, así como la instalación de algún acceso más desde el paseo a la playa, aparte de los que ya hay previstos en el proyecto, en la ubicación que sea más ventajosa para el interés general". Y señalaba que el resto de deficiencias alertadas por los residentes debían ser contestadas por el Ayuntamiento.

Regeneración con áridos con cantos rodados

En lo que respecta a la regeneración de la cala, hay que recordar que los ecologistas alertaron que la aportación de áridos con cantos rodados se realizó desde la desembocadura del río, lo que iba a aumentar la turbidez del agua y podía afectar negativamente a las praderas de fanerógamas marinas que pueda haber en los fondos de esa zona marina, así como las praderas de posidonia oceánica que hay cartografiadas a poca distancia de la zona regenerada.

Esta obra para recuperar el frente litoral ha representado una inversión de 617.268,40 euros, con el objetivo de frenar la erosión de este tramo de costa mediante la aportación de canto rodado y la creación de un paseo de 750 metros con un muro de contención que permite el tránsito peatonal, que solo existía antes en una parte.