El alcalde de San Vicente advierte del "caos" que se han encontrado en el Ayuntamiento

Un Ayuntamiento "caótico" y "judicializado", con unos problemas aún más graves de lo que pensaban y una plantilla desmotivada y a la que le falta personal por todas partes. El alcalde Pachi Pascual (PP) ha hecho balance este lunes de la situación en la que el nuevo ejecutivo de PP y Vox se ha encontrado la Corporación municipal, dos meses y medio después de su toma de posesión. Ha destacado el problema de la limpieza viaria y recogida de residuos, la falta de infraestructuras deportivas y el retraso de otras como el segundo pabellón o el Centro del Agua, así como la falta de personal del área de Recursos Humanos, y de otros departamentos como Servicios Sociales o Policía Local.

La suciedad y las basuras mantienen en jaque a San Vicente

De cualquier forma, el primer edil a su vez ha destacado que están trabajando en revertir esta situación, recordando que "no se puede arreglar en dos meses y medio lo que no se ha hecho en ocho años", queriendo enviar un mensaje "positivo" y que pronto se verán mejoras en temas tan sensibles como la limpieza, que tantas quejas han generado por la prórroga forzosa de la contrata desde 2020 y el retraso en la nueva licitación. Así, ha criticado “la herencia recibida, con importantes problemas lastrados desde hace años fruto de la nula gestión del anterior gobierno local”.

De esta forma, Pascual ha presentado los resultados de este análisis realizado en todas las áreas municipales que aborda la problemática encontrada en el Ayuntamiento por el actual equipo de gobierno y las primeras medidas planificadas en los dos meses iniciales de la legislatura.

El primer edil ha lanzado un primer mensaje esperanzador indicando que “a pesar de los graves problemas hallados, se está trabajando a contrarreloj para transformar un Ayuntamiento caótico y judicializado en una administración moderna y eficaz”. 

La situación es, según Pascual, “más grave de lo que nos esperábamos tras 8 años de mala gestión del gobierno del PSOE en coalición con otras formaciones de izquierdas”. El alcalde ha detallado que “nos hemos encontrado con las arcas prácticamente vacías en muchas concejalías, con numerosos procesos judiciales en marcha, algunos de los cuales lastran servicios fundamentales como la limpieza y la recogida de residuos, y con una plantilla exigua en todas las áreas, a todas luces insuficiente para prestar con calidad todos los servicios que esta ciudad necesita”.

En este sentido, Pachi Pascual ha señalado que, en conjunto, “faltan por cubrir en torno a 53 puestos de trabajo, de una plantilla de 400, una octava parte. Y existe un claro déficit de infraestructuras y dotaciones y, por qué no decirlo, una preocupante falta de recursos materiales y humanos en materia de limpieza y recogida de residuos”. Como ejemplo de “la gestión desastrosa del anterior equipo de gobierno”, ha destacado que “ni siquiera la web municipal está plenamente operativa, el primer escaparate y nexo de comunicación con los ciudadanos no funciona como debería”.

En la nueva etapa de gobierno, el primer edil ha asegurado que “empezamos a ver la luz ahora con la preparación de una batería de propuestas, muchas de las cuales se irán notando en los próximos meses”. Las primeras medidas que se presentarán en las próximas semanas irán destinadas a mejorar la limpieza y la recogida de residuos como principal prioridad marcada por el equipo de gobierno.

La herencia recibida

En este servicio, el alcalde de San Vicente ha criticado “la herencia recibida, con importantes problemas lastrados desde hace años fruto por la nula gestión del anterior Gobierno local, a pesar de lo cual estamos trabajando para introducir cambios a corto y medio plazo, con los pocos recursos que nos han dejado”. Pascual ha avanzado, además, que “estamos volcados para dar un impulso al nuevo pliego que reemplazará la caduca contrata de Recogida de Residuos que ya lleva cinco prórrogas por las que se reclama al Ayuntamiento 4,5 millones de euros”. 

Otros problemas que se están abordando son el colapso de la planta de transferencias y la puesta en marcha de un servicio de desbroces “que fue desmantelado desde hace dos años”, ha recordado el alcalde, que ha pedido la colaboración de la ciudadanía “porque esto no se arregla de hoy para mañana, será necesario un tiempo prudencial para empezar a ver los efectos de las medidas y la cooperación de todos”. 

Recursos Humanos

En cuanto a Recursos Humanos, Pachi Pascual ha asegurado que faltan en torno a 53 empleados públicos para completar la plantilla municipal, lo que representa en torno al 12%, y ha remarcado la necesidad de reforzar la propia concejalía de Recursos Humanos y las áreas de Derechos Sociales y Policía Local. Ya se han incorporado 7 personas al departamento de Servicios Sociales y 3 agentes a la Policía Local, además del proceso en curso que permitirá la llegada de 5 agentes más. El responsable municipal ha informado de que “a día de hoy, el déficit es de 13 agentes” para alcanzar la plantilla de 86 agentes, una cifra por otra parte que ha reconocido Pascual es insuficiente para un municipio de 60.000 habitantes como San Vicente.

“Nuestra labor a partir de ahora es convocar oposiciones para cubrir todos los puestos necesarios y generar bolsas de trabajo, resolver expedientes abiertos desde hace años, responder a los diferentes procesos judiciales y requerimientos que siguen archivados y realizar un plan de futuro, hasta ahora inexistente, que nos vaya sacando del colapso y desmotivación generalizada”, ha afirmado el alcalde.

Grandes proyectos

En relación a dotaciones y grandes proyectos, Pachi Pascual ha mantenido su compromiso para impulsar el auditorio y centro cultural La Yesera, desarrollar el Plan Edificant, que lo ha calificado de "fracaso" en San Vicente, o dotar a la ciudad de nuevas instalaciones deportivas con el desarrollo de obras que sufren retrasos significativos como el segundo pabellón, cuyas obras empezaron en 2020, estuvieron un año paralizadas y su presupuesto se ha disparado 2 millones, de los 7,1 millones inicialmente previstos a 9,1, sin descartar que el coste final sea aún mayor. O la piscina de verano, cerrada desde el año 2020 por la puesta en marcha del proyecto del Centro del Agua. El primer edil ha expresado su deseo de reabrir estas últimas dependencias en 2025 con una nueva piscina olímpica y otra de verano, para lo que están trabajando en la segunda fase del Centro del Agua, después de que el vaso de piscina haya sufrido daños irreparables.

Como última reflexión, el alcalde ha insistido en “solicitar a la ciudadanía que nos dé margen para afrontar la problemática encontrada porque, lo que no se ha hecho en ocho años, no se puede solucionar en dos meses y menos cuando la mayoría de concejalías están sin presupuesto a día de hoy, lo que pone las cosas aún más difíciles”.