Sant Joan da 10 días para que los placeros del mercado decidan si quieren trasladarse o renuncian

La Concejalía pregunta a los comerciantes cuáles son sus necesidades concretas de suministro de electricidad o agua y equipamiento en su futura ubicación temporal, en la plaza de L'Ordana

"Estamos mal, vamos a ver qué hacemos, si recogemos firmas en contra del proyecto, no estamos de acuerdo", afirman los afectados

Interior del mercado municipal de Sant Joan

Interior del mercado municipal de Sant Joan / L. Gil López

L. Gil López

L. Gil López

Diez días. Es lo que tienen de plazo los comerciantes del mercado municipal de Sant Joan d'Alacant para decidir si quieren trasladarse a una instalación temporal mientras duren las obras de reforma o, por el contrario, renuncian y prefieren cobrar una indemnización.

El Ayuntamiento va a acometer la reforma para modernizar, ampliar y digitalizar el inmueble municipal, como ha informado este diario, con un coste total de dos millones de euros.

De esa cantidad, 1,6 millones proceden de una subvención del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, a cuenta de los fondos Next Generation de la Unión Europea, mientras que el Consistorio aporta los 400.000 euros restantes.

El concejal de Comercio, Manuel Nieto, ha enviado una comunicación a los placeros para informarles de que se va a proceder al inicio de las obras y, por ello, la única opción es un traslado provisional de los puestos del mercado.

"No es posible mantener en uso el mercado durante la ejecución de las obras, ya que hay que retirar la cubierta de fibrocemento, con el consiguiente riesgo de pulverización del espacio, y modificar el acceso en la fachada principal, además de meter instalaciones de climatización sobre los puestos", dice el escrito.

El concejal incide en que las soluciones de instalaciones temporales "suponen un importante desembolso" para las arcas municipales. Por ello, requiere a los comerciantes para que comuniquen "de forma expresa, por escrito, su voluntad de trasladarse temporalmente" a una ubicación provisional "que pondrá a su disposición el Ayuntamiento con una fuerte inversión".

Además, recuerda a los placeros que tienen que decir cuáles son sus necesidades concretas respecto al suministro de electricidad o agua y el equipamiento "imprescindible para el desarrollo de su actividad". La ubicación provisional será la plaza de L'Ordana, a unos pocos cientos de metros del mercado.

Eso sí, el concejal da la opción de que renuncien por propia voluntad a trasladarse, pero también deberán "manifestarlo de forma expresa, cuantificando de forma justificada la indemnización que pudiera corresponderles".

Asimismo, en el escrito enviado deja constancia que la "posible o presunta indemnización nunca superará el coste" que para el Ayuntamiento supone acometer la instalación provisional.

La carta finaliza con el periodo de tiempo que da a los placeros del mercado para que respondan si aceptan el traslado provisional o renuncian: "Plazo máximo de 10 días desde la notificación". Los comerciantes recibieron el escrito el pasado 12 de marzo, de manera que tienen hasta el mismo viernes 22 para tomar una decisión.

Nieto ha explicado que el documento enviado es para que los placeros tengan claro qué es lo que necesitan y lo puedan solicitar por escrito. Sobre la indemnización, no puede establecer una cuantía porque depende de la situación particular de cada uno.

El concejal se muestra optimista con las fechas previstas de ejecución, pese a que el Ayuntamiento tiene poco más de nueve meses, hasta el 31 de diciembre, para que las obras de reforma del mercado municipal estén realizadas al 60% o perderá la subvención de 1,6 millones del Gobierno central. "En principio, vamos bien, acabamos de recibir el proyecto final y estamos a punto de sacar la licitación".

Los placeros consultados, por su parte, están en las antípodas del edil tras conocer cómo va a ser la reforma. "Estamos mal, vamos a ver qué hacemos, si recogemos firmas en contra del proyecto o qué, nos quitan el aparcamiento, los almacenes, no estamos de acuerdo", explican apesadumbrados.

Además, consideran que están instalados en la incertidumbre permanente: "Primero nos dijeron que nos trasladaríamos en abril; ahora nos dicen que para junio, es un desastre".

Mientras, el siguiente paso es conocer cuántos de los placeros aceptan el traslado y cuántos deciden renunciar y solicitan la indemnización. En pocos días llegará la respuesta.