Hacienda rechaza el 83% de las enmiendas de la oposición a un Presupuesto de Alicante "frenado" por el bipartito

El informe, desvelado este lunes, se firmó por los técnicos hace dos semanas - Los funcionarios tumban la única propuesta registrada por Vox, mientras que dejan vivas 19 peticiones de cambios de Unidas Podemos (incluida la única enmienda a la totalidad que supera el trámite inicial), 14 de Compromís y 11 del PSOE - El bipartito prevé arrancar este martes una nueva ronda de contactos para intentar aprobar las cuentas

Barcala, escoltado por Sánchez y López, durante la presentación del borrador del Presupuesto

Barcala, escoltado por Sánchez y López, durante la presentación del borrador del Presupuesto / Alex Dominguez

C. Pascual

C. Pascual

Los técnicos de la Concejalía de Hacienda han tumbado el 83% de las enmiendas registradas al Presupuesto para 2023 de Alicante. Así figura en el informe que se abordará en la Comisión de Hacienda prevista para el próximo viernes, 10 de febrero. Previamente, el bipartito ha anunciado para este martes una nueva ronda de negociaciones con los grupos de la oposición en busca de la abstención que le necesita para poder aprobar las cuentas en el último año de mandato. Hasta ahora, tanto la izquierda como Vox han mostrado su intención de rechazar el documento.

En el trámite técnico, cuyo desenlace se ha conocido este lunes pese a estar firmado hace dos semanas, se ha quedado la única propuesta registrada por Vox, que hasta la fecha ha sido el principal aliado del bipartito para aprobar las cuentas en el Pleno. Una enmienda a la totalidad basada en el rechazo a la implantación de la zona de bajas emisiones en Alicante. "No pueden aceptarse técnicamente las propuestas formuladas en el escrito de enmienda a la totalidad. No se aporta texto alternativo alguno. En este caso, no cabría tal y como se solicita, la devolución al equipo de gobierno para proceder a una nueva elaboración que tenga en cuenta las aportaciones realizadas, por lo que técnicamente debe rechazarse la enmienda, al margen de la discusión o debate de carácter político que proceda", según figura en el informe.

Tampoco ha superado el trámite de Hacienda la enmienda a la totalidad presentada por el PSOE, que sí ha conseguido el aval técnico para once de las 69 enmiendas parciales presentadas. Unidas Podemos, por su parte, mantiene vivas 19 de las 151 enmiendas presentadas, mientras que Compromís se queda con 14 propuestas de las cincuenta registradas.

Estas peticiones de cambio se votarán en la Comisión de Hacienda del viernes. Las dos alegaciones a la totalidad presentadas por los grupos socialista y Vox han sido rechazadas por "incumplir la regla del equilibrio presupuestario entre gastos e ingresos, ya que en sus respectivas propuestas planteaban un desequilibrio patrimonial (mayores gastos que ingresos)", según el gobierno municipal. También se ha aceptado una enmienda parcial del PP para subsanar un error en las cuentas respecto a la recogida selectiva de residuos textiles.

Dos semanas en un cajón

El informe, facilitado este lunes a los grupos de la oposición, lleva firma de los técnicos de Hacienda del pasado 23 de enero. Esa lentitud contrasta con el interés inicial de Barcala de aprobar el Presupuesto cuanto antes, al tratarse además de un año electoral. De hecho, en su día, se comprometió a empezar el año con las cuentas en vigor, algo que no sucede en Alicante desde 2015.

Los grupos municipales tuvieron hasta el 13 de enero para presentar sus propuestas, es decir seis días hábiles a contar desde la aprobación de las cuentas en Junta de Gobierno, que tuvo lugar el 4 de enero. El pasado viernes, 3 de febrero, tras ser una pregunta recurrente en las últimas semanas, el alcalde anunció que el documento de Hacienda ya estaba listo. Además, aseguró que el gobierno municipal será "generoso" para facilitar la aprobación del Presupuesto municipal para 2023. "La propuesta del gobierno va a ser lo más generosa que permite el Presupuesto, que hay que recordar que no es para el gobierno, es para la cuidad de Alicante. Voy a poner toda la carne en el asador porque queremos que el Presupuesto salga adelante", apuntó Barcala en una comparecencia pública tras un acto en la plaza del Ayuntamiento.

En respuesta a las preguntas de los medios, Barcala lamentó que la oposición haya mostrado su rechazo inicial a las cuentas ante la proximidad de las elecciones. "Entiendo que todos estén en clave electoral, pero les pido que olviden las elecciones porque el Presupuesto es para todo el año. Electoralmente parece que todos tienen interés de que no haya presupuestos. Todos los grupos tienen la misma responsabilidad, sean grandes o pequeños", añadió el regidor, quien se mostró confiado en conseguir un "pleno", es decir, en aprobar todos los presupuestos del mandato.

En declaraciones facilitadas este lunes, la edil de Hacienda, Lidia López, ha destacado que el equipo de gobierno "cumplió con su compromiso y responsabilidad de elaborar y presentar su anteproyecto de Presupuestos a finales de noviembre", según recoge un comunicado de prensa, aunque el compromiso del alcalde pasaba por aprobar las cuentas en tiempo y forma, es decir, arrancar el año con el Presupuesto en vigor.

De hecho, el retraso en los trámites -agudizados en la fase de enmiendas- contó con la reprobación del propio interventor municipal, quien en su informe no se mordió la lengua, señalando los motivos y las consecuencias de una práctica que ya es habitual en el Ayuntamiento de Alicante. "Para poder dar cumplimiento a los tiempos legalmente establecidos, el expediente debió haberse remitido completo a la Intervención a finales de septiembre. Habiéndose sometido el expediente a Intervención dos meses después del plazo legalmente establecido, resulta difícil dar cumplimiento a la obligación legal de que el presupuesto entre en vigor el día uno de enero", señalaba el interventor en su informe, en el que añadía además por qué el trámite de fiscalización se extendió más allá de los diez días supuestamente previstos: "El anexo de personal contenía errores aritméticos que imposibilitaban la labor de control, y que la oficina presupuestaria se limitó a incorporar al presupuesto sin verificaciones para detectar posibles errores. Ni la memoria ni el informe económico-financiero citan cuestiones significativas, únicamente en lo que al importe se refiere (Contrato Programa y Centro de Tecnificación) pero sin justificar las cuantías". 

El alcalde, junto a la vicealcaldesa y la concejala de Hacienda, tras presentar el borrador del Presupuesto el pasado noviembre, antes de aprobarse en Junta de Gobierno

El alcalde, junto a la vicealcaldesa y la concejala de Hacienda, tras presentar el borrador del Presupuesto el pasado noviembre, antes de aprobarse en Junta de Gobierno / Alex Dominguez

Reacciones de la oposición

El portavoz de Vox, Mario Ortolá, explica que lo que su grupo propone en la enmienda "es la devolución al equipo de gobierno del proyecto de presupuestos, no la aceptación de un texto alternativo tal y como dice el informe de los técnicos". "Vox propone la eliminación de la Zona de Bajas Emisiones porque, tal y como exponemos, va a suponer un recorte drástico de libertades a los alicantinos y la ruina al pequeño comercio y hostelería, ya que el equipo de gobierno, en uso del gran margen que permite la Ley, en lugar de ir a mínimos ha ido a máximos. El daño será irreparable", asegura el portavoz de la formación ultra, quien subraya su intención de que "los grupos municipales voten la enmienda a la totalidad de Vox a pesar del rechazo de los técnicos de la concejalía de Hacienda, tal y como ha sucedido en otras ocasiones".

Por su parte, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, ha lamentado que "el PP de Barcala y Mazón están demostrando cada día la irresponsabilidad, incapacidad y fracaso de su gestión en el debate de presupuestos del año 2023". "El PP vuelve a llegar muy tarde, olvida la participación ciudadana y no muestra voluntad alguna de llegar a acuerdos. Su bloqueo a la negociación deja un nulo margen a poder acordar nada en un presupuesto que, además, no recoge las líneas prioritarias de las aportaciones de Compromís, como son fortalecer y modernizar los servicios públicos municipales, avanzar hacia la transición ecológica en el modelo de ciudad, reforzar los equipamientos públicos sociales, deportivos en los barrios, ampliar la respuesta social a la crisis y audar a familias y sectores productivos frente a la inflación". Según Bellido, Alicante está "ante un gobierno caducado, con un alcalde que pide a gritos pasar a la oposición, y que ha tirado la toalla en aprobar presupuestos y avanzar en los grandes retos de la ciudad".

Por otro lado, el portavoz de Unidas Podemos, Xavier López, ha calificado de "cobarde" al gobierno local, además de acusarlo de "mentir públicamente". "Ha tenido en un cajón el informe de Hacienda desde el 23 de enero, eso son dos semanas negando la tramitación de unas cuentas en un momento importante de crisis económica derivada de la inflación y de paralización de las principales obras de la ciudad", ha señalado López, para añadir a continuación: "Es un gobierno irresponsable porque ha sido incapaz de confeccionar unos presupuestos con un proyecto para Alicante y han puesto encima de la mesa unas cuentas ideológicas muy alejadas del centro político y de una posición con margen de maniobra para alcanzar ningún acuerdo tras años de claudicar ante las exigencias de Vox". Para la coalición, "estos presupuestos siguen siendo los de la injusticia fiscal porque siguen favoreciendo a las clases altas y privilegiadas".

Por último, desde el PSOE ha tomado la palabra la candidata a la Alcaldía, Ana Barceló. "En pleno mes de febrero al alcalde le han entrado las prisas por negociar el presupuesto, cuando es un trabajo que debería de haber realizado antes de que acabara el año. El alcalde ha evidenciado su incapacidad para hacer su trabajo en el tiempo que correspondía. Solo ha movido ficha tras el órdago que le ha lanzado la ultraderecha, que ha sido su socio preferente y que, ahora, le ha puesto contra las cuerdas", ha señalado Barceló, quien ha asegurado que "dinamizar la economía, generar empleo, fortalecer el escudo social, situar en el corazón de las políticas a las personas y, sobre todo, escuchar las demandas reales de los alicantinos y alicantinas es lo que tendría que haber hecho Barcala antes de presentar un presupuesto que demuestra que carece de proyecto para la ciudad de Alicante".