Las farmacias alicantinas se quedan sin medicamentos habituales para la depresión, las náuseas, el dolor o la fiebre

Las medicinas con problemas de suministro triplican a las que faltaban antes de la pandemia

Ya hay más de 900 fármacos en desabastecimiento, entre ellos Primperán, Lexatín, Algidol, Paracetamol o Ibuprofeno, y algunos antibióticos, antihipertensivos, antiepilépticos y tratamientos para el TDAH

Las farmacias alicantinas se quedan sin medicamentos habituales para la depresión, las náuseas, el dolor o la fiebre

INFORMACIÓNTV

J. Hernández

J. Hernández

La rotura del stock farmacéutico afecta a medicamentos no solo hospitalarios, también a algunos de los más recetados para combatir la depresión, la ansiedad o el estrés; así como a analgésicos y antipiréticos, es decir, fármacos para el dolor o la fiebre, y a otros habituales para las náuseas. Las medicinas con problemas de suministro triplican a las que faltaban antes de la pandemia. Ya hay 932 fármacos en desabastecimiento frente a los 350 de hace cuatro años, algunos de uso tan común como Amoxicilina, Paracetamol, Ibuprofeno, Primperán, Lexatín o Algidol, según refleja la Agencia Española de Medicamentos, que pertenece al Ministerio de Sanidad.

Unos datos que ratifica el "Informe anual sobre desabastecimiento de medicamentos" de 2023 de la Agrupación Farmacéutica Europea, que concluye que los medicamentos en falta han aumentado un 36 por ciento en 2023 en comparación con el año anterior, tendencia que se repite en todos los países de la Unión Europea. Sin embargo, según datos proporcionados por el Centro de Información sobre el Suministro de Medicamentos (CISMED), en 2022 se registraron problemas en 403 presentaciones de medicamentos en España, pero en 2023 se alcanzó la cifra récord de 947 presentaciones afectadas, lo que supone un crecimiento de un 135%.

Jesús Juana Roa, farmacéutico titular de oficina de farmacia en Alicante y tesorero del Colegio Oficial de Farmacéuticos, apunta que sobre todo están teniendo problemas con los inyectables para diabéticos, con presentaciones de Paracetamol, "problemas con Ibuprofeno, con algunos antidepresivos y ansiolíticos; prácticamente en toda la gama de productos tenemos problemas de suministro".

"Tenemos problemas con Paracetamol, Ibuprofeno, con algunos antidepresivos y ansiolíticos; prácticamente en toda la gama de productos tenemos problemas de suministro"

Jesús Juana Roa

— Farmacéutico

Este profesional señala que es muy habitual tener que enviar al paciente de nuevo al médico para que le recete una alternativa. "Depende del tipo de tratamiento el médico se encuentra con que tampoco tiene alternativa. Con antieméticos (para las náuseas y vómitos) tenemos otras opciones y se les cambian pero con antidiabéticos o antidepresivos hay dificultades".

Esta falta produce toda una cadena de trastornos, principalmente al paciente, que no puede llevarse su tratamiento. Tiene que volver al médico para el cambio de receta, lo cual supone para el facultativo una sobrecarga de trabajo cuando de por sí tienen las agendas saturadas en Atención Primaria; y a los farmacéuticos, que tienen que buscar alternativas. "A veces al no tenerlas hay gente que lo entiende pero otra que no tanto. Se enfadan con nosotros o con el médico, y nosotros no tenemos la culpa de la falta de suministro. Es una cadena, en la que todos somos perjudicados".

Multifactorial

Esta tendencia al alza impacta directamente en el acceso de la población a sus tratamientos pues los problemas de suministro son una constante en los últimos años y se han acentuado con la pandemia, la guerra de Ucrania y la escasez de materias primas.

Hay otros factores que intervienen, como el aumento puntual de la demanda, algo estacional, por ejemplo, en la época de resfriados y gripes; pero también hay factores nuevos como la influencia de las redes sociales a la hora de explicar la alta demanda de Ozempic, medicamento para diabéticos que se usa para adelgazar. Así como la regulación de precios de los medicamentos y la concentración de producción de materias primas en pocos países.

En el informe de la Agrupación Farmacéutica Europea se muestra que todos los países analizados (26) han experimentado desabastecimiento de medicamentos en los últimos meses y que la carga que supone la escasez de medicamentos para los pacientes y las farmacias de toda Europa se está incrementando, lo que afecta negativamente a la confianza de los pacientes en la cadena de suministro farmacéutico.

De hecho, los farmacéuticos dedican casi tres veces más tiempo a solucionar problemas de desabastecimiento que hace una década, 10 horas semanales de media; a través de mecanismos como Farmahelp, una herramienta digital y gratuita que puso en marcha el Consejo General de Colegios Farmacéuticos para atajar la falta de medicamentos y que permite a las boticas contactar con otras de su entorno cuando un paciente necesite alguna medicina y no dispone de ella para evitar que tenga que volver al médico a que le recete una alternativa. Forman parte de la misma casi 300 farmacias de la provincia de Alicante.

Un farmaceútico de Alicante con jarabes

Un farmaceútico de Alicante con jarabes / Pilar Cortés

Desde Luda Partnerts, otra red digital que ayuda a las farmacias en la lucha contra los problemas de suministro", señalan que los medicamentos que están presentando más problemas para encontrarse en las farmacias alicantinas son aquellos destinados el tratamiento de la diabetes (Ozempic, Fiasp, Victoza y Trulicity) debido a un uso que no tiene que ver con la indicación para esta patología sino con la alta demanda de personas que quieren adelgazar. Luda cuenta con más de 250 boticas adheridas en la provincia de Alicante.

Asimismo, otros muy buscados estos días son Algidol, que sirve para el tratamiento del dolor y la fiebre, siendo denominado como analgésico y antipirético, algo que coincide con las infecciones respiratorias; así como Intuniv, que se utiliza para tratar el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH); e Imigran: indicado para aliviar el dolor de cabeza y otros síntomas de un ataque de migraña.

Entre las categorías más afectadas por la falta de suministros se encuentran también los antibióticos, entre los que sobresalen las amoxicilinas, antihipertensivos como Barnix y antiepilépticos, en los que destaca Depakine. Además, cobran especial relevancia Fixaprost, utilizado en el tratamiento del glaucoma, por el alto número de veces que se ha localizado en las búsquedas de las farmacias.

Lexatín

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios advierte asimismo del desabastecimiento de las populares cápsulas de Lexatin, pertenecientes a la familia de las benzodiazepinas, además en la preparación de 1,5 mg cápsulas duras, muy demandada. En su página web, la Agencia explica que el titular de autorización de comercialización está realizando una distribución controlada al existir unidades limitadas.

La fecha de inicio de la falta es del pasado 19 de enero pero no hay fecha prevista de finalización, lo cual supone que puede ir para largo.

Esta falta afecta a muchos pacientes. En 2022 se vendieron 56.370 medicamentos del grupo de las bendodiazepinas en España según el Informe de Prestación Farmacéutica en el Sistema Nacional de Salud. Es el tercer grupo de tratamientos más habituales de entre los distribuidos desde las farmacias. La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios señala que, en dosis bajas, este fármaco alivia la tensión psíquica, la ansiedad y el nerviosismo. A dosis altas tiene un efecto sedante y relajante muscular.

Otra carencia a mencionar es el Primperán, para aliviar las náuseas y vómitos, de uso muy habitual entre la población. Sufre problemas de producción que lleva años arrastrando y que la Agencia del Medicamento señala que no se resolverán antes de mayo de 2025, aunque en este caso hay otros con el mismo principio activo.

Están asimismo en desabastecimiento Adenosina e Ivabradina, para las arritmias; Simvastatina, para el colesterol; o Valsartán, para la hipertensión y la insuficiencia cardiaca.

Un problema crónico

La herramienta Luda Partners ha elaborado el I Informe de Desabastecimiento de Medicamentos, según el cual este problema está alcanzando dimensiones preocupantes, convirtiéndose en crónico y creciente. "Este fenómeno ha hecho saltar las alarmas entre los profesionales de la salud, en particular entre los farmacéuticos, debido al constante aumento en la escasez de presentaciones de fármacos esenciales".

"En respuesta a esta creciente crisis, la herramienta Luda ha demostrado ser un recurso muy valioso. Con más de 3.500 farmacias adheridas al cierre del año 2023, ya ha permitido ayudar a más de 260.000 pacientes en toda España. Estos números subrayan su importancia para mitigar los impactos del desabastecimiento, conectando a las farmacias de manera efectiva y asegurando el acceso continuo a tratamientos médicos".

Entre las soluciones propuestas apuntan aumentar la autonomía y atribuciones del farmacéutico, así como potenciar servicios profesionales asistenciales impulsados por la tecnología; y la formulación magistral.