La ladera de la Beniata de Alcoy, al fin reparada

El Ayuntamiento termina las obras de consolidación de la zona afectada por un derrumbe en abril de 2022 y recuerda que pedirá el importe a la UPV, propietaria de los terrenos

Vista de la ladera de la Beniata de Alcoy, donde se aprecian los trabajos realizados.

Vista de la ladera de la Beniata de Alcoy, donde se aprecian los trabajos realizados. / Juani Ruz

La ladera de la Beniata de Alcoy, afectada por un gran derrumbe en abril de 2022, ha sido al fin reparada, un año y cuatro meses más tarde, aunque queda por dilucidar quién se hará finalmente cargo de las obras, un aspecto que sin duda ha demorado de manera notable su ejecución. El Ayuntamiento ha informado esta semana de la finalización de los trabajos, asumidos de manera subsidiaria por la administración municipal con el fin de agilizar el proceso, tal y como han recordado desde el Consistorio. Porque en realidad no debía haber sido él quien llevara a cabo la reparación, sino la Universitat Politècnica de València (UPV), propietaria de los terrenos.

El derrumbe se produjo el 7 de abril del año pasado, presumiblemente como consecuencia de las continuas lluvias que cayeron a lo largo de la primavera de 2022. Buena parte del extremo de la ladera se vino abajo, cayendo un gran volumen de cascotes sobre un solar que hasta entonces se utilizaba como aparcamiento. Los únicos daños materiales significativos fueron los que sufrieron varios vehículos que se encontraban allí estacionados, especialmente uno de ellos, pero las consecuencias podían haber sido más graves, al tratarse de una zona transitada y junto a la calle Alicante, una de las principales vías de acceso al centro de la ciudad.

El Ayuntamiento y la UPV mantuvieron diferentes conversaciones para establecer quién asumiría la realización de los trabajos y de qué forma, hasta que el pasado mes de abril la institución local procedió a actuar de manera subsidiaria. La concejal de Urbanismo, Vanessa Moltó, subraya en este sentido que "para el gobierno municipal este era un proyecto necesario y urgente y no podíamos esperar a los plazos que marcaba la UPV como propietaria de los terrenos". La edil recalca que "desde el primer día hemos trabajado para resolver el problema lo más rápido posible y dar tranquilidad a todo el vecindario".

La ladera tal y como estaba antes de que comenzaran los trabajos.

La ladera tal y como estaba antes de que comenzaran los trabajos. / JUANI RUZ

Los trabajos se iniciaron a mediados de mayo, con un prespuesto de 63.162 euros y un plazo de 75 días, que el Ayuntamiento destaca que se ha cumplido. Han consistido, explican fuentes municipales, en la retirada de tierras y piedras procedentes del desprendimiento, así como en acondicionar la superficie del talud. En la zona superior, para reducir la inclinación y mejorar la estabilidad de la ladera, se ha realizado un retaluzado. Finalmente, para la consolidación del talud y su protección frente a futuras inestabilidades, han instalado anclajes en la zona más vertical, y se ha colocado una malla para contener el terreno, cubierta con gunitado.

Ahora, el Ayuntamiento debe acordar con la UPV de qué manera le devuelve el montante de estos trabajos, al haberse realizado en terrenos de su propiedad. No obstante, las mismas fuentes recuerdan que se trata de una solución puntual para reparar este derrumbe en particular, pero que además está prevista una actuación general en la zona, con el objetivo de consolidar toda la ladera. Con este fin se está redactando una memoria que permita conocer el estado de los terrenos y plantear una solución definitiva. 

Asimismo, se han retirado las vallas instaladas en su momento en la calle Alicante, por lo que vuelven a estar abiertos al tráfico los dos carriles de la calzada. En cuanto al aparcamiento inutilizado debido al derrumbe, ahora que han concluido las obras de la ladera se limpiará y acondicionará, para que vuelva a estar operativo.