El gobierno de Barcala abre al puerta a un recorte en las inversiones en el presupuesto de Alicante para 2024

El ejecutivo local descarta una subida de impuestos municipales, frente a otros ayuntamientos de la provincia dirigidos por el PP, mientras admite la dificultad de ajustar en las cuentas el incremento del gasto corriente

El alcalde de Alicante, Luis Barcala, conversa con el concejal de Hacienda, Toni Gallego, en una imagen reciente

El alcalde de Alicante, Luis Barcala, conversa con el concejal de Hacienda, Toni Gallego, en una imagen reciente / Jose Navarro

C. Pascual

C. Pascual

El gobierno local de Alicante asegura que la Junta de Gobierno aprobará en breve el proyecto de presupuestos municipales para 2024, pero sin todavía dar una fecha concreta. Sea la que sea, el documento ya va con retraso según los tiempos marcados por la Intervención del Ayuntamiento para que puedan estar en vigor en el arranque del próximo año, un hecho que no se da en Alicante desde 2015, aún con el gobierno de Castedo al frente del gobierno municipal. Desde entonces, todas las cuentas -salvo las de este 2023, que son las prorrogadas de 2022- se aprobaron tarde, condicionando la ejecución de los proyectos incluidos. "Estamos en la fase final. En los próximos días podremos mandarlas a Intervención", señaló el portavoz del equipo de gobierno, Manuel Villar, tras matizar, a preguntas de este diario, las palabras dichas después de la Junta de Gobierno. El trámite de fiscalización suele prolongarse más de un mes, por lo que los plazos están ya más que ajustados.

En un informe de Intervención conocido a principios de este año, el alto funcionario no se mordió la lengua respecto al retraso en la aprobación del Presupuesto de 2023 -que finalmente quedó en el aire por falta de apoyos-, señalando los motivos y las consecuencias de una práctica que ya es habitual en el Ayuntamiento de Alicante. "Para poder dar cumplimiento a los tiempos legalmente establecidos, el expediente debió haberse remitido completo a la Intervención a finales de septiembre. Habiéndose sometido el expediente a Intervención dos meses después del plazo legalmente establecido, resulta difícil dar cumplimiento a la obligación legal de que el presupuesto entre en vigor el día uno de enero", señaló hace casi un año el interventor en su informe.

En los últimos años, la Junta de Gobierno aprobó el proyecto de presupuestos, ya con el visto bueno de Intervención, tras superar el cambio de año. En 2021, el ejecutivo aprobó el documento el 21 de enero; en 2022, el 24 de enero, y este año, el 4 de enero, aunque en esta última ocasión no tuvo efectos prácticos porque finalmente no se acabó llevando al Pleno por la falta de apoyos del gobierno liderado por Luis Barcala, en un ejercicio marcado por las elecciones municipales del 28M.

Por otro lado, cuestionado este martes Villar sobre el retraso acumulado, ya que el órgano fiscalizador ha reiterado en numerosas ocasiones que deben recibir el texto en el mes de septiembre para llegar a tiempo, Villar ha asegurado que "no se puede enviar lo que no está acabado", en alusión al borrador de las cuentas para 2024. Además, aunque no ha querido concretar detalles del documento, ha descartado que se vayan a subir impuestos -"no se contempla en este presupuesto"-, tal y como están haciendo otros ayuntamientos gobernados por el PP como Benidorm, aunque ha admitido la "dificultad" para ajustar las cuentas debido a que se "han incrementado partidas de gasto corriente de manera importante", abriendo a su vez la puerta a recortes en las inversiones para poder compensar ingresos y gastos.

"Gobierno paralelo"

Por otro lado, Villar aseguró que el futuro "gobierno paralelo", con el nombramiento de dos coordinadores generales y hasta diez directores generales (aunque cuatro están "congelados" por Vox), está a la espera de un informe de fiscalización. Aunque no lo concretó el portavoz del equipo de gobierno, dando por buenas las recientes palabras del alcalde, se da por hecho que el documento a la espera del visto bueno técnico es el relativo a las bases para impulsar los concursos anunciados por el propio alcalde, Luis Barcala, para cubrir los puestos de altos cargo.

Eso sí, al menos tres de esos cargos ya tienen nombres y apellidos. Como este diario reveló la pasada semana, Asunción Martínez García es la persona elegida por el alcalde para asumir el nuevo cargo de coordinadora general de gestión municipal. Se trata de uno de los altos cargos creados en la nueva estructura directiva, impulsada recientemente por decreto del alcalde y cuyas retribuciones se aprobaron el pasado jueves, por vía de urgencia, en el pleno ordinario de octubre. Martínez será la principal incorporación del alcalde para su "gobierno paralelo", ocupando una de las dos coordinaciones generales. El otro puesto lo asumirá Vicente López, actual jefe de Gabinete de Alcaldía, que fue jefe de prensa del PP durante su etapa en la oposición, entre 2015 y 2018.

Entre los tres primeros cargos en adjudicarse, también figura la dirección general de Plan Urbanístico, que quedará encargada a Leticia Martín, la arquitecta que ha estado dos años al frente de la Oficina del PGOU del Ayuntamiento de Alicante y que ha tenido que regresar temporalmente al Ayuntamiento de San Vicente, de donde es funcionaria, al acabarse su comisión de servicios.