Segunda RFEF

De la Nava agradece la bofetada del entrenador del Hércules

El jugador salmantino explota sus mejores recursos justo después del «castigo» de Torrecilla por el error grave que arruinó la victoria frente al Espanyol B

El centrocampista comprendió el enfado hecho público por el técnico y ha respondido a él con excelente talante y dos goles en tres partidos

Carlos de la Nava corre hacia Samu Vázquez para agradecerle la asistencia que le permitió marcar en Andratx el domingo.

Carlos de la Nava corre hacia Samu Vázquez para agradecerle la asistencia que le permitió marcar en Andratx el domingo. / Miquel Borras / LOF

Pedro Rojas

Pedro Rojas

Rubén Torrecilla no disimuló su enfado. No lo hizo ni después del partido perdido en Sant Adrià de Besós ni en la rueda de prensa previa a la visita del Formentera. En ambos momentos insistió en el error grave que permitió al Espanyol B remontar un encuentro que Ketu puso muy de cara en la primera parte. Un error de marcaje de Carlos de la Nava, desconectado del partido, de la jugada y de su par, permitió a Omar Sadik anotar el primero de sus goles. Al entrenador blanquiazul no se fue de la cabeza el fallo con el paso de los días, por eso le dejó fuera de la convocatoria en la siguiente semana. No le sentó en el banquillo, le mandó a la grada.

Son esos episodios desagradables que mal encarados, mal entendidos o mal gestionados pueden abrir grietas en los vestuarios, sobre todo cuando se acumulan los malos resultados. No fue el caso. Torrecilla explicó a De la Nava que se quedaría sin jugar, que le vendría bien desconectar una jornada, limpiar la mente, no darle más vueltas al fallo, dejar de obsesionarse con él. Resetear para volver más fuerte, fue su argumento textual.

Salud mental

El salmantino entendió la medida y le confesó al preparador que se sentía muy culpable por lo ocurrido en la Ciutat Esportiva Dani Jarque, que sabía el daño que le había hecho al equipo con su error de concentración. La conversación se cerró amablemente, sin dobleces, abiertamente. De la Nava vio desde el palco de jugadores la derrota contra el Formentera en la última acción del encuentro, un remate de cabeza inapelable de Caturla que seguro que con él cerca, con su envergadura, puede que hubiera tenido un desenlace diferente.

No lo pensó. Se centró en el mensaje de su entrenador. Pasar página, apelar a eso tan mundano del «lo hecho, hecho está». Carlos regresó a los entrenamientos y a la titularidad sin aspavientos, con las pilas cargadas y muy motivado. Volvió a la primera línea en un puesto incómodo, ejerciendo de delantero centro, como única referencia ofensiva, como clave para concretar el plan de juego que se apagó cuando Artiles se fracturó el peroné antes del descanso.

Carlos de la Nava festeja su tanto en Andratx abrazado a Candelas y delante de Marcos Mendes.

Carlos de la Nava festeja su tanto en Andratx abrazado a Candelas y delante de Marcos Mendes. / Miquel Borras / LOF

El Hércules volvió a perder, la tercera vez seguida, pero en esta ocasión, no por culpa del salmantino, que hizo todo lo que se le pedió sin rechistar, sin una mala cara, sin Mendes y sin Coscia a su lado para repartirse la tarea. Esa semana, antes del viaje a Torrent, después del entrenamiento, De la Nava se acercó a Torrecilla para decirle, míster, muchas gracias, necesitaba parar, me ha venido muy bien para volver a centrarme. El entrenador le dio una palmada y activó la mejor versión de su centrocampista, que ha marcado dos goles en las últimas tres semanas, todas formando de inicio, siendo capital, con todos los sentidos puestos en la contienda.

Solo es una historia de vestuario, una de tantas, pero también sirve para comprender por qué un equipo que emitía señales muy preocupantes se ha levantado sacando adelante dos bolas de partido en condiciones muy desfavorables, bajo mucha presión y peleando sobre moqueta en la segunda de ellas. Carlos agradeció la bofetada, la encajó con señorío y, lo más importante, con profesionalidad.

Mendes, el pichichi menos goleador de Segunda RFEF

Marcos Mendes está decidido a batir los registros de los máximos goleadores del Hércules en la última década. Sin embargo, aún está lejos de convertirse en el pichichi de Segunda RFEF. El máximo artillero del grupo es el que menos puerta ha visto de todos los atacantes que encabezan los diferentes grupos que conforman la cuarta categoría del fútbol nacional. He hecho, hasta este momento hay once futbolistas con más número de goles que el bisauguineano en una lista que, de momento, encabeza en solitario Rufino Sánchez, «Rufo». El delantero del Pontevedra lleva 16 tantos anotados este curso, uno más que Unai Ropero, que con el filial del Alavés le está pisando los talones.

Máximos goleadores de Segunda RFEF después de las 22 primeras jornadas de Liga.

Máximos goleadores de Segunda RFEF después de las 22 primeras jornadas de Liga. / INFORMACIÓN

Históricamente, la competencia en el grupo tres, el que reúne a los equipos valencianos, catalanes y baleares, siempre ha sido la mayor, de ahí que cueste más sobresalir en el capítulo anotador. El futbolista africano, que ha visto puerta en las últimas dos jornadas de Liga, solo ha tirado un penalti este curso, el que le marcó al Torrent en la primera vuelta en el Rico Pérez. Eyong, del Sevilla B, encabeza el grupo cuatro con 11 dianas, y Morcillo, del Guadalajara, lidera el grupo cinco con 14. El domingo visita Alicante el penúltimo clasificado, la Penya Independent (12 horas), un rival propicio para que Mendes prolongue su buen momento en el área y se acerque a Rufo.