La repatriación de Rafael Altamira hasta El Campello, a punto: 55.000 euros de coste a falta de fijar la fecha

El Ayuntamiento termina la farragosa tramitación para traer hasta el cementerio campellero los restos del jurista y su mujer desde México, cuyo coste será aportado por el Consistorio, la Generalitat y la Diputación

Solo falta que se coordinen las tres administraciones para completar la operación y fijar una fecha

El biznieto de Altamira y el alcalde tras acordar iniciar el proceso a principios de 2022

El biznieto de Altamira y el alcalde tras acordar iniciar el proceso a principios de 2022

El complejo y farragoso proceso para repatriar hasta El Campello los restos del jurista Rafael Altamira llega a su fin. Casi 75 años después de su muerte en México, el prestigioso humanista alicantino está ya solo a un paso de volver a El Campello "de sus amores", deseo que expresó en 1935, antes que la Guerra Civil le obligara al exilio. Queda que el Ayuntamiento, la Diputación y la Generalitat, las tres administraciones implicadas en sufragar los cerca de 55.000 euros en los que se ha presupuestado su repatriación, se coordinen, cierren flecos y fijen una fecha.

Desde el Consistorio campellero han explicado este viernes que está "todo ultimado" ya y el proceso cerrado. Se han cubierto todos los trámites ante el Gobierno de México y el Consulado de España en México, destacando la implicación del cónsul general de España en México. Y han tenido conocimiento del proceso la Diputación, la Generalitat, la Embajada de España en México, la Embajada de México en España y el Consell Valencià de Cultura (CVC).

El jurista y humanista Rafael Altamira

El jurista y humanista Rafael Altamira / INFORMACIÓN

Así, los restos de Rafael Altamira (Alicante, 1866-México DF, 1951) y de su esposa Pilar Redondo viajarán en unos ataúdes especiales hasta el aeropuerto de El Altet, haciendo escala en Madrid, para reposar finalmente en el nicho donde están los progenitores del humanista en el camposanto de El Campello. Se ha cerrado el traslado con la funeraria Gayosso de México, firma de referencia de Embajada de España en el país americano. Y una vez se suban al avión en México Distrito Federal pasarán a manos ya de la funeraria alicantina ASV, con la que ha contactado el Ayuntamiento de El Campello. De esta forma se concretará una repatriación para la que ya se hizo un intento que no fraguó en 1987 por parte de la Diputación, presidida entonces por Antonio Fernández Valenzuela, a instancias de la hija del humanista.

Las dos cabezas visibles de este largo proceso que ahora llega a su fin han sido el alcalde Juanjo Berenguer (PP) y el biznieto del jurista, Ignacio Ramos Altamira, que han puesto todo su empeño en lograrlo. El primer edil ha manifestado este viernes que "estamos plenamente satisfechos de conseguirlo al fin, y de aunar inquietudes y voluntades de entidades tan importantes como la Generalitat y la Diputación. Esto es cosa de todos. Sin su apoyo explícito e inequívoco no hubiera sido posible", agradeciendo así la implicación de Carlos Mazón, primero como presidente de la Diputación y ahora de la administración autonómica, y de Toni Pérez al frente de la Institución Provincial, para que este proceso llegue a buen puerto.

La tumba de Altamira se encuentra en un pésimo estado de conservación

La tumba de Altamira se encuentra en un pésimo estado de conservación / JOSÉ M. PORTILLO

Y su biznieto ha manifestado que "estamos muy contentos de que por fin se esté concretando el retorno de nuestro bisabuelo. Ha sido un proceso largo y complicado por las trabas administrativas y por la lentitud de las gestiones. Estamos agradecidos al Ayuntamiento de El Campello, la Diputación y la Generalitat por el apoyo, así como al cónsul de España en México, Manuel Hernández Ruigómez. Ahora ya estamos a la espera de que se fije la fecha".

Una aventura burocrática

Y es que ha sido toda una aventura burocrática y de buceo en legajos para completar esta tramitación. Primero hubo que conseguir el alta de defunción de 1951 en el Registro Civil de México DF y en el Consulado General de España en el país, así como el de su esposa. Unos documentos escritos a mano que tienen un gran valor simbólico.

Una complicación especial ha sido la autorización familiar para la exhumación y repatriación, ya que no valía el permiso de los biznietos al haber una familiar más directa viva, en Zamora. Así, ha sido necesario que su nieta Mariluz Altamira García-Tapia, de 87 años, firmara un acta notarial específica para poder llevar a cabo la operación, tal y como informó este medio el 14 de abril de 2023. Los poderes incluyen la cremación en México, pero finalmente los restos no va a ser incinerados y se traerán intactos a España.

Del mismo modo ha sido necesario conseguir el certificado de la titularidad del panteón donde reposan actualmente los restos, que pertenece a la Casa de España, para cedérselo a la funeraria para que pueda realizar al exhumación. Una tumba que presenta un pésimo estado de conservación, indigno de Rafael Altamira, una figura clave de la historia de España, ya que fue el primer español en formar parte del conocido hoy como Tribunal Internacional de La Haya, además de ser dos veces propuesto para el Premio Nobel de la Paz y doctor honoris causa por las universidades de Burdeos, París, México, Santiago de Chile, Lima, Columbia y Cambridge.

Además, el alcalde ha mantenido desde que se iniciaron los trámites a principios de 2022 reuniones con Mazón, primero como presidente de la Diputación y luego como máximo responsable de la Generalitat, con Toni Pérez como titular de la Institución Provincial, y con la que era consellera de Participación y Cooperación con el Botànic, Rosa Pérez Garijo.

Altamira reconoció personalmente en una entrevista concedida al diario “El Día” el 2 de mayo de 1935, que “cuando se me aparte de la vida oficial me retiraré al rincón de mis amores más gratos: a Campello”. Así, su deseo está más cerca que nunca de cumplirse de alguna forma, casi un siglo después.