Subsidio para mayores de 52 años: ¿Se puede trabajar y cobrar la ayuda?

Las personas que cobran este subsidio siguen cotizando a la Seguridad Social de cara a la jubilación

Subsidio para mayores de 52 años: todos los cambios tras el último acuerdo

INFORMACIÓN

Eneko López Rico

Eneko López Rico

El subsidio para mayores de 52 años es una prestación económica que ofrece el sistema de protección social en España. Está dirigido a las personas desempleadas mayores de 52 años que han agotado todas las demás prestaciones contributivas y asistenciales. Este subsidio tiene como objetivo principal proporcionar un soporte económico a este grupo de población hasta que puedan acceder a la pensión de jubilación, facilitando así una transición más llevadera hacia la jubilación en un contexto de desempleo prolongado.

El subsidio para mayores de 52 años es una ayuda económica que asciende al 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), que en 2024 se sitúa en unos 480 euros mensuales. Este subsidio se puede percibir hasta que el beneficiario cumpla la edad de jubilación, siempre que se mantengan las condiciones necesarias para su cobro.

Para poder acceder a este subsidio, es necesario cumplir con una serie de requisitos específicos:

  1. Edad. Tener cumplidos 52 años o más en el momento de solicitar el subsidio.
  2. Desempleo. Estar en situación legal de desempleo y estar inscrito como demandante de empleo.
  3. Cotización. Haber cotizado por desempleo al menos seis años a lo largo de su vida laboral.
  4. Derecho a pensión. Cumplir con todos los requisitos, salvo la edad, para acceder a cualquier tipo de pensión contributiva de jubilación en el sistema de la Seguridad Social.
  5. Renta. Las rentas no deben superar el 75% del salario mínimo interprofesional (SMI) en términos de renta mensual, excluida la parte proporcional de dos pagas extraordinarias.

Cómo se puede cobrar el subsidio para mayores de 52 años y trabajar a la vez

Es posible cobrar el subsidio para mayores de 52 años y trabajar a la vez, aunque existen ciertas condiciones que se deben cumplir para compatibilizar ambas situaciones. Así pues, aquellos beneficiarios que cobren esta ayuda tiene que saber que se reduce la cuantía del subsidio y la cotización proporcionalmente a la jornada de trabajo. 

Así, si se encuentra un empleo a tiempo parcial, es posible compatibilizar el salario del trabajo con el subsidio. En este caso, la cuantía del subsidio se reduce proporcionalmente a las horas trabajadas. Por ejemplo, si se trabaja media jornada (50% del tiempo completo), se percibirá el 50% del subsidio.

Pensionistas, en una imagen de archivo.

Pensionistas, en una imagen de archivo. / EP

Y si el trabajo es a tiempo completo, el abogado Ignacio Solsona en su canal de Youtube ‘Laboroteca’, explica que “En cuanto al trabajo a tiempo completo es posible compatibilizarlo con un 50% de la cuantía del subsidio en virtud de un plan de fomento del empleo que existe actualmente. Eso sí, durante esta compatibilización no se cotiza de cara a la jubilación”, explica.

Los autónomos constituyen un caso especial. Aquellos que estén recibiendo el subsidio y deseen darse de alta como autónomos para llevar a cabo una actividad específica deberán suspender el subsidio, ya que es incompatible con la actividad del autónomo. No obstante, según Solsona, es posible reanudar el subsidio dentro de un período máximo de cinco años si deciden darse de baja como autónomos. "Podrán reanudarlo sin ninguna condición si se dan de baja antes de 24 meses desde el inicio de la actividad. Sin embargo, si se dan de baja después de los 24 meses, deberán cumplir con los requisitos del cese de actividad, que son bastante complejos". 

Además, señala que los autónomos deben optar por la prestación por cese de actividad en su mutua o reanudar el subsidio. No es posible cobrar la prestación por cese de actividad y luego reanudar el subsidio.

En resumen, el subsidio para mayores de 52 años es una herramienta importante del sistema de protección social en España, diseñada para proporcionar un soporte económico hasta la jubilación. Aunque es posible compatibilizar este subsidio con el trabajo, ello implica una serie de ventajas e inconvenientes que deben ser cuidadosamente considerados por cada beneficiario. La flexibilidad que ofrece el sistema permite adaptarse a diferentes situaciones laborales, asegurando así que las personas mayores de 52 años puedan mantener una estabilidad económica mientras se preparan para su jubilación.